Este caso se suma a los siete que desde enero de 2015 se han producido en territorio estadounidense, en una oportunidad que los soldados afganos para obtener el estatus de refugiado en Norteamérica.
Los tres desertores recibían adiestramiento militar en las bases de Fort Benning y Fort Gordon, en Georgia, y eran parte de un programa de entrenamiento del Pentágono con aliados de Washington.
Estos soldados son estudiantes militares internacionales que reciben entrenamiento con el objetivo de ayudar en conflictos en otras partes del mundo.
"Es importante dejar claro que la mayoría de los afganos que son entrenados en Estados Unidos completan su entrenamiento y regresan a su país", ha declarado el portavoz de la Armada, Patrick Evans, a un canal local estadounidense.
"Sin embargo ha habido ocasiones en el que los servicios han identificado planes de deserción. EN esos casos, los estudiantes han sido inmediatamente devueltos a su país", ha señalado Evans.
A principio de 2015 el Gobierno de Estados Unidos estableció un operativo de búsqueda de dos traductores afganos que desaparecieron de otra base en Georgia.
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