Ginebra, 18 sep.- La somalí Hawa Aden Mohamed ha sido galardonada con el prestigioso Premio Nansen para los Refugiados por haber ayudado a centenares de niñas desplazadas de su país a superar un pasado de violaciones, agresiones sexuales, violencia extrema y marginación, anunció hoy el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
El ACNUR manifestó su satisfacción porque el jurado del premio haya valorado y reconocido "el trabajo humanitario excepcional e infatigable de Mohamed con las niñas y mujeres somalíes, un trabajo realizado bajo circunstancias extremadamente difíciles en un país asolado por décadas de violencia, conflicto y abusos a los derechos humanos".
El premio data de 1954 y fue instaurado por el ACNUR para promocionar el interés mundial por los refugiados y para "mantener vivo" el espíritu de Fridtjof Nansen, el primer Alto Comisionado para los Refugiados en el periodo de la Liga de Naciones (embrión de la ONU).
Este año el jurado ha valorado especialmente que Mohamed fuera una refugiada que vivía en Canadá y que, sin embargo, decidió abandonar "su seguridad" para volver a su país de origen y ayudar a las mujeres y a las niñas, las más vulnerables entre las víctimas de una nación desangrada por la violencia, las hambrunas y el machismo.
En 1999 estableció en Galkayo el Centro para la Paz y el Desarrollo, un centro educativo para niñas desplazadas, "que consiguió salvar, cuidar y educar a cientos de niñas y mujeres, víctimas de los peores tipos de violencia", afirmó el alto comisionado para los Refugiados, António Guterres, citado en un comunicado.
Mohamed, de 63 años y conocida en Galkayo como "Mama Hawa", considera que la educación es la base para "todo", especialmente para las niñas.
"Creo que no tener educación es como estar enfermo, sin educación es muy difícil ser consciente de lo que pasa a tu alrededor, sin educación es como si no existieras, físicamente sí, pero mental y emocionalmente no existes", afirmó Mohamed.
El centro que fundó y dirige ofrece educación secundaria y formación profesional para que las niñas puedan ser económicamente independientes e influir en el futuro de su país.
"Ya es hora de que la cultura ayude al cambio. Tenemos que mantener lo bueno y dejar partir lo malo. Y lo bueno es fortalecer a las niñas", agregó.
Además de educación, el centro también proporciona asesoramiento para niñas que han sido víctimas de la mutilación genital, y las ayuda psíquica y físicamente a superar esta práctica, que muchas veces conlleva una infección que acaba siendo mortal.
Paralelamente, Mama Hawa hace campaña para acabar con esta mutilación que viola los derechos fundamentales de las mujeres.
La enviada especial del ACNUR para los Refugiados, la actriz estadounidense Angelina Jolie, felicitó a la laureada destacando su coraje y el hecho de haber dedicado su vida a ayudar y educar niñas.
La concesión del galardón va acompañada de un premio en metálico de 100.000 dólares, que debe ir destinado a un proyecto relacionado con el trabajo por el cual la persona distinguida ha sido laureada.
La suma es pagada al 50 % por Suiza y Suecia.
Dos décadas de violencia y hambrunas han forzado a más 2 millones de somalíes a abandonar sus hogares -un tercio de la población- y a convertirse en desplazados internos (1,5 millones) o refugiados en terceros países (1 millón).
Desde su creación, el centro ha ayudado a más de 215.000 personas.
La ceremonia de entrega del galardón tendrá lugar el próximo 1 de octubre en Ginebra y en ella participarán la cantante pop-rock Annie Lennox, la laureada con el premio de la Paz 2011 Leymah Gbowee y la cantante lírica Barbara Hendrix.
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