Los oficialistas y opositores califican las elecciones como la "madre de las batallas", especialmente por Asunción, donde la puja será entre el oficialista Arnaldo Samaniego, por el partido Colorado, y el opositor Mario Ferreiro, un presentador de televisión.
El propio presidente Cartes consideró que la elección tiene un carácter de referéndum, según dijo en entrevista con la AFP. El partido Colorado lleva 15 años en el poder de las intendencias de Asunción y sus alrededores.
Algunas encuestas dan ganador a Samaniego, quien busca la reelección, y otras a Ferreiro, postulado por frente opositor de varios partidos y movimientos sociales.
Un tercer candidato, Ricardo Meyer, apoyado por el expresidente izquierdista Fernando Lugo, figura muy lejos en la intención de voto.
Los encuestadores solamente coinciden en la posible baja participación de electores, situación que favorecerá con seguridad los votos duros del oficialismo.
Al igual que en otras capitales latinoamericanas, los extranjeros mayores de edad con radicación definitiva también pueden votar.
"A mi partido le va a ir bien", dijo a la AFP el presidente. "Es un partido muy popular y creo que va a tener buenas elecciones en líneas generales", agregó.
"Pero eso se decide como el fútbol, este domingo", subrayó el jefe de Estado. "Sin duda es un gran referendum", admitió Cartes, tras señalar que la pugna electoral es el factor político más cercano a los ciudadanos.
Cartes consideró que existen hechos "irrefutables" para quienes hagan un balance de su gestión: "Paraguay ha aumentado sus 'upgrades'. Estamos mejorando y estamos a un grado de obtener la mejor calificación", enfatizó.
Pese a la crisis regional por la desaceleración china, Cartes prevé que su país crecerá más de 3% en contraste con las predicciones negativas que esperan los demás países del Mercosur. "Ese es el verdadero veredicto para un gobierno", remarcó.
Arnaldo Samaniego se considera un candidato fuerte, pese a algunos sondeos que anticipan su derrota. "Si fuera por las encuestas yo no hubiera sido intendente hace cinco años", dijo a la AFP. Entonces se vaticinaba la victoria de su rival opositor Miguel Carrizosa.
El oficialista también apeló a a su elección como candidato en las internas del partido Colorado en julio, cuando recibió un apoyo contundente.
Samaniego estima que un segundo mandato le permitirá finalizar las obras de infraestructura que inició en el gobierno municipal.
Sin embargo, el senador Miguel Saguier, presidente del partido Liberal (el mayor de la oposición), aseguró que una eventual derrota de Samaniego en Asunción y su zona metropolitana "será un duro golpe" para el gobierno de Cartes, por ser la zona más poblada del país con unos dos millones de habitantes.
En representación de su bancada, Saguier denunció ante observadores de la OEA que el gobierno no acordó liberar los fondos que destina la justicia electoral a los partidos para financiar la campaña.
El jefe de observadores de la OEA, Hugo de Zela, trató este tema con Cartes y dijo que corroborar algunas informaciones, apuntó.
El opositor Mario Ferreiro es un duro crítico de la gestión de Samaniego. "Es imposible vender la marca Paraguay con una capital que se cae a pedazos", dijo a la AFP.
"Como intendente, Samaniego no supo ejecutar los millones de fondos que tuvo a su disposición porque la estructura de su partido (Colorado) es tan pesada, como un hipopótamo, que no le permite moverse", observó.
El senador Carlos Filizzola, exintendente de Asunción y partidario del ex presidente Lugo, dijo a su vez que los comicios medirán de alguna manera el nivel de reprobación contra Cartes.
"Cartes no está haciendo un buen gobierno y encima quiere concentrar todo el poder como en la época de la dictadura de (Alfredo) Stroessner" (1954-1989), enfatizó.
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