Michelle Obama y su popularidad hacen campaña junto a Clinton

Michelle Obama tiene prevista este jueves su primera aparición junto a Hillary Clinton en la campaña por la Casa Blanca, brindando el peso de la primera dama a la candidata demócrata, que busca atraer el voto de las mujeres.

Más popular que su marido, la primera dama ha sido una infrecuente pero contundente fuerza en la campaña electoral de 2016, con poderosos discursos contra el candidato republicano, Donald Trump, y a favor de Clinton.

La abogada de 52 años no ha dudado en atacar la retórica estridente del magnate y lo que ha llamado su "intolerable" conducta sexual hacia las mujeres.

Los sondeos dan a Clinton, que aspira a ser la primera mujer en dirigir la mayor potencia mundial, un dominio sobre las intenciones de voto femenino, cementado tras las controversias que siguen a Trump por las acusaciones de conducta inapropiada con mujeres.

A menos de doce días para las elecciones presidenciales, Clinton busca capitalizar el pedigrí de una de las figuras más populares de la política estadounidense.

Michelle Obama subirá al escenario con Clinton en Winston-Salem, Carolina del Norte, uno de los estados claves de los comicios del 8 de noviembre.

La ex secretaria de Estado marcha adelante en las encuestas, con una ventaja de 5,4 puntos frente a Trump, según el último promedio de encuestas de Real Clear Politics.

"Me siento realmente bien, llena de energía, trabajando duro", dijo Clinton a los periodistas a bordo de su avión el miércoles, cuando cumplió 69 años.

El encuentro entre las dos primeras damas -la actual y la ex- era casi impensable hace ocho años: las primarias demócratas de 2008, que enfrentaron a Barack Obama y Hillary Clinton, habían sido amargas y tensas.

Pero las cicatrices se cerraron y las dos mujeres, ambas nativas de Chicago, vieron servido en bandeja de plata, por Donald Trump, un tema en común: la defensa de las mujeres, en el marco de las declaraciones misóginas y degradantes del republicano difundidas en un video de 2005.

Michelle Obama se convirtió en "nuestra arma no tan secreta", reconoció recientemente Brian Fallon, portavoz de Clinton.

El video de 2005 en el que Trump se jacta de que su estatus de celebridad le permite manosear a mujeres con impunidad ha golpeado su campaña.

Pero el empresario, de 70 años, se enorgulleció por una nueva encuesta que lo coloca dos puntos arriba -aunque dentro del margen de error- en Florida, un estado que puede decidir la suerte de la elección.

"Pienso que tendremos una victoria espectacular", dijo Trump a CNN, mostrándose dispuesto a abrir su propia billetera para inyectar recursos a la campaña.

El viernes, Barack Obama hará campaña por Clinton en Florida, un estado que ganó, aunque por poco, en 2008 y 2012; y el compañero de fórmula, Tim Kaine, tendrá también una presentación en ese estado.

La encuesta de Bloomberg del miércoles colocó a Trump con 45% frente a 43% para Clinton entre los posibles votantes en Florida, un margen muy cerrado para un estado que el millonario no puede perder.

Según el promedio de Real Clear Politics, Clinton sigue adelante en ese estado con 1,6 puntos.

Pero el sondeo de Bloomberg documentó una ligera ventaja de Trump entre los votantes independientes, que pueden tener la llave del triunfo en Florida.

Carolina del Norte votó por el republicano Mitt Romney en 2012, pero el estado sureño ha virado hacia los demócratas en la actual campaña presidencial.

El apoyo de Michelle Obama podría marcar la diferencia para Clinton, quien tiene dos puntos de ventaja en ese estado, pero depende de una fuerte presencia en las urnas de la población negra.

Sin margen para errores, Trump acudió a su principal aliada: su esposa Melania.

La exmodelo eslovena ha tenido un discreto rol en la campaña de su marido, al reconocer que su "prioridad" es el cuidado del hijo de ambos, Baron, de 10 años.

Pero en una entrevista conjunta con la cadena ABC, Trump pareció sorprenderla con un papel más activo.

"De hecho ella va a hacer dos o tres discursos", dijo Trump. "Y van a ser grandes, importantes discursos".

"Oh", exclamó ella.

Mostrar comentarios