Así ha abierto el debate parlamentario sobre la cuestión de confianza que él planteó, y que previsiblemente superará porque la CUP ya ha anunciado su apoyo en la votación del jueves.
Ha constatado que este nuevo curso político empieza de "forma inédita", porque lo es un debate de cuestión de confianza en la cámara catalana.
Pero también lo considera inédito porque han pasado muchas cosas que considera excepcionales desde las elecciones catalanas, como la renuncia de Artur Mas a la Presidencia y la falta de apoyo para tramitarse los Presupuestos de 2016.
Puigdemont augura que durante este debate algunos aprovecharán para que se pare la legislatura y haya elecciones, y otros para enviar "a la papelera de la historia" el proceso soberanista, y ha considerado que son actitudes legítimas, pero ha pedido respetar el resultado del debate sea cual sea: "Les propongo una cadena de confianzas".
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