El miedo a Le Pen crece a la vista de los sondeos. Más cuando se sabe que el proletariado la apoya más que nunca. El anuncio de Valls de que no votará a su partido sino a Macron, el centrista que se fue del partido para montar el suyo propio ha sido una bomba de relojería. Y ha estallado. Sus secuelas acaban de verse en una encuesta. Más de la mitad de los franceses considera que el candidato socialista a la Presidencia, Benoît Hamon, debería retirar su candidatura en favor del izquierdista Jean-Luc Melenchon, situado por delante de él en los sondeos. Hamon y Melenchon no han querido unir sus candidaturas y han provocado una ruptura en el voto. Hamon barrió en las primarias a Valls pero sus resultados en las encuestas son más que decepcionantes, en ningún caso llegaría a la segunda vuelta.
Según un sondeo de Harris Interactive publicado este jueves por RMC y BFMTV, el 53 por ciento de los consultados cren que el socialista debe abandonar su candidatura, que este miércoles sufrió un nuevo revés al anunciar el ex primer ministro Manuel Valls su respaldo por el centrista Emmanuel Macron, favorito en las encuestas.
Precisamente, el 63 por ciento de los encuestados considera que Valls y otros dirigentes socialistas que en los últimos tiempos han ofrecido su apoyo a Macron --un antiguo ministro del Gobierno de François Hollande-- no deberían ser excluidos del Partido Socialista pese a su 'traición' a Hamon.
El candidato socialista criticó este miércoles a Valls, aunque sin nombrarle, por su gesto, pidiendo a los ciudadanos que sancionen a la "vieja política" y a quienes "van donde les lleve el viento", y apeló a cerrar filas a los partidarios de Melenchon para que apoyen su candidatura.
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