Amsterdam, 30 abr.- Varios millares de holandeses se congregaron hoy en la céntrica plaza Dam de Amsterdam para despedir a la reina Beatriz, que abdicará en poco menos de una hora, y dar la bienvenida a su primogénito, Guillermo-Alejandro, como nuevo rey de los Países Bajos.
Las autoridades de Amsterdam dispusieron que se colocaran en esa plaza, con capacidad para unas 25.000 personas, pantallas gigantes desde las que neerlandeses y visitantes pudieran seguir las ceremonias que comienzan a las 08.00 GMT.
A la estación central de la capital holandesa están llegando miles de ciudadanos, desde todos los rincones del país, para festejar también este último día de la Reina, una fiesta nacional que a partir de 2014 se celebrará el 27 de abril, fecha del cumpleaños del todavía príncipe de Orange.
"Esto es muy agradable. Yo ya he estado en la abdicación de la reina Juliana en 1980. Vengo del norte, de la provincia de Frisia y esto me parece emocionante", señaló a la cadena pública NOS un holandés de avanzada edad.
Portando coronas de papel o de plástico, camisetas, bufandas o sombreros naranjas, los holandeses celebran ya este día, muchos después de una larga noche de festejos en bares y "coffeeshops" de la ciudad, que ha amanecido bajo un frío casi invernal.
Beatriz de Orange pasará el testigo de la jefatura de Estado a Guillermo-Alejandro, de 46 años, a las 08.00 GMT, quien en ese momento se convertirá en el rey más joven de las monarquías occidentales y en el primer varón en reinar en los Países Bajos desde hace más de un siglo.
En ese acta también estamparán su rúbrica Guillermo-Alejandro y su esposa Máxima, que llevará el título de reina consorte.
El acto tendrá lugar en el Palacio Real de Amsterdam y tras la ceremonia Beatriz, Guillermo Alejandro y Máxima, así como sus tres hijas, saldrán a saludar al balcón que da a la céntrica plaza Dam, donde los ya nuevos reyes de los Países Bajos se darán su primer baño de masas.
Los invitados empiezan ya a llegar al palacio real, siguiendo el estricto protocolo pedido por la Casa Real: traje corto para las damas a la altura de la rodilla y oscuro para los caballeros, sin portar grandes pamelas o exagerados tocados que impidan ver sus rostros.
La medida se dirige especialmente a las personalidades del Estado holandés que tendrán que prestar promesa o juramento al nuevo rey.
La ceremonia de investidura tendrá lugar sobre las 13.30 horas (11.30 CET) en la Iglesia Nueva (Nieuwe Kerk), donde acudirán todas las delegaciones reales invitadas, incluida una treintena de príncipes herederos que tomarán nota de la ceremonia de hoy.
Guillermo-Alejandro no será coronado, en el sentido literal, ya que los reyes de Holanda nunca llevan corona a lo largo de su reinado, pero sí portará el manto real sobre un frac negro con corbata blanca, y tendrá a su lado los símbolos de la monarquía: el cetro, el globo terráqueo, una espada y el estandarte real de los Orange.
Después se celebrará una recepción en el Palacio de Amsterdam y a última hora de la tarde los nuevos reyes de los Países Bajos realizarán una travesía real por las aguas del río Ij, tras la que asistirán con sus invitados a una fiesta final en el Muziekgebouw aan't Ij.
La reina Beatriz se despidió anoche de las casas reales reinantes en el mundo y de las instituciones holandesas e internacionales con una cena de gala en el Rijksmuseum de la capital del país.
Con sus últimas palabras como reina, Beatriz quiso rendir un homenaje a su marido, el príncipe Claus, fallecido en 2002, y del que dijo que casarse con él fue su mejor "decisión".
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