Los radicalismos en Europa pueden alcanzar casi el 20% del Parlamento

La crisis económica, los sacrificios sociales, la corrupción y la poca confianza hacia los dirigentes políticos y los partidos tradicionales están impulsandolas opciones radicales, de derecha e izquierda. Una encuesta europea otorga a estas formaciones casi el 20% de los diputados en el Parlamento.

Según el último sondeopublicado por 'Poll Watch', la ultraderecha europea, impulsada porMarine Le Pen en Francia,lograría90 parlamentarios,lo que le permitiría formar partido propio, siempre que las distintas fuerzas políticas se pusieran de acuerdo.

Por su parte,la izquierda radical,que tiene como fuerza de empujeSyrizaen Grecia, alcanzaría57 parlamentarios. En total, estas formaciones escoradas en los extremos ideológicos sumarían147 diputadosde un Parlamento de 751 miembros; es decir, prácticamente uno de cada cinco asientos en la cámara.

Ni la ultraderecha europea es homogénea, ni tampoco la izquierda radical. En los discursos pueden converger un lenguaje populista, demagogo, alarmista, simplista y consignas panfletarias.

Los intereses de las formaciones que conforman la derecha radical son diferentes. ElUKIP británicoquiereblindar la independencia del Reino Unidofrente a la 'amenaza' de Europa; mientras que el Frente Nacional deLe Penquiere proteger la identidad cultural y social de Francia y su tradición frente a la islamización.

Por su parte, en la izquierda extrema, los abertzales de EH Bildu se presentan en Europa como "la voz de Euskal Herria Rebelde", mientras que Syriza de Grecia se erige como el partido que aboga por la vuelta al draCma y por poner patas arriba la estructura actual de la UE.

Europa presenta una tendencia de ascenso al poder de los grupos populistas de derecha, que intentan con su influencia modificar la política migratoria, ser partidos de protesta o para sostener determinados gobiernos, como pasó con el apoyo de laLiga Norteal gobierno de Berlusconi.

También hay un ascenso de la izquierda radical. Pasó con el Movimiento Cinco Estrellas de Beppe Grillo, que se presentó como la esperanza ante la corrupción y el sinsentido de los programas políticos en Italia, pasó a ser una llave para la gobernanza en el país y el trabajo en la cámara ha acabado sacándole los colores: Ahora, el líder populista ataca a la prensa e profiere insultos machistas a sus contrincantes políticas.Las caras de la ultraderecha en Europa

Suiza:Suiza es mucho más queparaísos fiscales y pistas de esquiar. Este pequeño país, con 7,9 millones de habitantes, cuenta con la mayor representación de un partido de extrema derecha en su parlamento. Se trata del Partido del Pueblo Suiza, que sostiene al Gobierno actual, y que ha logrado instaurar cuotas de inmigración y renegociar la libre circulación con la Unión Europea con un referéndum que ha dado el sí a las fronteras.

Su discurso demagógico explota los miedos de la globalización. Uno de los principales ataques fueron los acuerdos de Schengen y entre sus medidas más populares; introducir en su legislación medidas contra el culto religioso.

Noruega:Ocupó titulares de la prensa internacional después de que un hombre de 33 añosBehring Breivik, asesinase a 77 personasy dijese que "había llevado a cabo el más sofisticado y espectacular ataque político cometido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial". Behring Breivik militó durante años enEl Partido del Progreso de Noruega,una fuerza política que ha ido arañando votos en los últimos años, pasando de un 15 por ciento en 2001 a un 23 por ciento en 2009. Sudiscurso xenófobo y ultranacionalistaavanza frente a los valores tradicionales de tolerancia y fraternidad.

Finlandia: El partido ultraderechistaVerdaderos Finlandesessubió tanto en las elecciones que se puso al mismo nivel de los conservadores y socialistas. La formación dirigida por el carismático eurodiputado populista y xenófobo Timo Soini casi quintuplicó su apoyo popular respecto a las elecciones de 2007 y obtuvo en torno al 19 por ciento de los votos, lo que se traduce en 39 escaños.Fue el tercer grupo más votado.

Francia:Desde 2002 el Frente Nacional ha tenido una alta presentación en la vida política gala, aunque registró un descenso en los comicios de 2007 (10 por ciento de los votos). La tendencia se invirtió con la renovación de la imagen del partido, protagonizada porMarine Le Pen, que logró un 17,9 por ciento de los votos en las últimas elecciones: Su receta: poner en el centro del debate a los inmigrantes, los banqueros y la crisis europea.

Austria:La extrema derecha austriaca ha avanzado de forma notable. Ha pasado de un 10 por ciento de los votos en 2002 al 17,5 por ciento en 2008. Los eslóganes más utilizados por su líder,Heinz-Christian Strache, tienen como punto de partida el antieuropeísmo, ¿Por qué tienen que pagar constantemente los austriacos, como los alemanes y los holandeses, por el pozo sin fondo de los países del sur de Europa?, se pregunta Strache.

Holanda. La islamofobia es la retórica del PVV, el partido creado por Geert Wilders, que se convirtió en la segunda fuerza más votada en las elecciones europeas de 2009, después de la Democracia Cristiana. Esta formación es de corte xenófobo, aunque rechaza que se le equipare con un partido racista.

Italia.LaLiga Norteha construido un discurso como el Frente Nacional en inmigración, pero también ha sido una formación de gobierno, por sostener el ejecutivo deBerlusconi. Además, promovió la ley que considera delito la inmigración irregular. Recientemente ha saltado a los titulares por los ataques racistas a la ministra de Integración italiana, Cécile Kyenge, que nació en la República Democrática del Congo.

Hungría.Jobbik ha escalado en una década hasta convertirse en la tercera fuerza del país (el 16,7% de los votos) con un discurso racista, de ataque a gitanos, judíos y extranjeros. La formación toma sus raíces en la pérdida de confianza hacia los partidos clásicos y Europa. Ha apostado por el discurso ultranacionalista que reivindica el origen húngaro.

Grecia:El partidoneonaziAmanecer Dorado, liderado por Nikos Mijaloliakos, protagonizó escenas de inestabilidad en el seno de Parlamento Griego. La prensa localrecibió el buen resultado electoral que obtuvo la formación con titulares como "Los nostálgicos de Hitler entran en el Parlamento". La formación consiguió un 7 por ciento de los votos, 21 escaños en un parlamento que cuenta con 300 sillas. Su estrategia de cara al exterior es deslegitimar la UE.

Su líder, Mijaloliakos, un exoficial del Ejército de 55 años ha asegurado que su partido lucharía para que Grecia "no se convierta en una jungla social por los millones de inmigrantes que han llegado a nuestra patria sin preguntarnos".La izquierda radical, entre el populismo de Grillo y los ultranacionalistas de Bildu y el Sinn Fein

La expresión"izquierda radical"remite a los movimientos y partidos con un discurso extremo sobre la política comunitaria, el FMI y el BCE y que han encontrado acomodo en grupos radicales del 15M, en huelgas sindicales –en el otro lado del océano, un equivalente sería el movimiento de ocupación de Wall Street, pero también en movimientos populistas de soflamas ridículas y simplistas, como la coalición del cómicoBeppe Grillo.

Syriza en Grecia.Elvoto castigo y anti UE en Greciatomó fuerza conSyriza,formación que aboga por el abandono del euro y que se mostró en contra del pacto de austeridad para auxiliar las finanzas públicas. La formación incide en que la eurozona y la UE han llegado a un punto en que no pueden reformarse o reconstruirse y solo cabe su anulación. Esta coalición, liderada porAlexis Tsipas, parece que afianza su liderazgo de cara al próximo 25 de mayo y podría aventajar al partido de gobierno en dos puntos. Su líder, implicado desde muy joven en movimientos estudiantes de izquierda, insiste en pedir la vuelta al dracma y desaparecer de la Unión Europea actual.

Francia.La izquiersa más radical está representada enel Partido Anticapitalista (NPA),que nació en febrero de 2009, y que se constituyó para aunar toda la izquierda. Pero esta formación no propone nada para la construcción del partido. Su línea política esel Gobierno anti-austeridad. En su carta de presentación, esta formación decía que no quería emular el Partido Comunista Francés, ni ser el partido del enfado o la frustración. Pero al final recoge las protestas de este país. En sus filas hay jóvenes rebeldes, contrarios al 'establishment', que plantea inventar el socialismo del siglo XXI. Su líder,Olivier Besancenot, piensa que la situación electoral en Francia con el avance del Frente Nacional revela que "el sistema está carbonizado". También, dentro de la izquierda radical en Francia y Europa se sitúan políticos próximos a Jean-Luc Mélenchon, líder del Frente Izquierda Europeo.

EnItaliairrumpió con fuerza en los pasados comicios generales el Movimiento Cinco Estrellas, del cómico antisistema Beppe Grillo. Muchos italianos confiaron en esta formación de discurso fácil y líder histriónico como castigo a los dirigentes políticos y sus privilegios. Grillo, de 63 años y blanca cabellera, se lanzó con tremenda energía en los mítines donde denunciaba corrupciones y el supuesto expolio del país por parte de los políticos. Pero su discurso populista, algo euroescéptico, ha acabado evidenciándole y ahora ha radicalizado su discurso e incluso introduce expresiones de tinte machista" ¿Qué harías si te encontraras con la Boldrini (presidente de la Cámara de Diputados) de noche en un coche?", escribió Grillo en sublogdespués de que representantes de su formación la insultaran en una sesión plenaria.

En Alemania,Die Linkenació en 2007 como fusión entre poscomunistas y socialistas disidentes.Cercano a los planteamientos de Syriza, defiende "como partido de izquierda de Alemania, ir en contra del pacto fiscal y el mecanismo europeo de estabilidad". Por cierto, que esta formación ha propuesto a Edwards Snowden como premio Nobel de la Paz para 2014.

EnIrlanda, el Sinn Féin, antiguo brazo político del IRA,ha ensalzado con la crisis un discurso para conectar con los indignados con los bancos, la crisis y la clase política que "ha arruinado el país". Su candidato en las presidenciales de otoño de 2011, Martin McGuinness, quedó tercero en los comicios generales.

EnEspaña, el equivalente de extrema izquierda radical y nacionalista esEH Bildu. El cabeza de lista a los comicios europeos, Josu Juaristi, asegura que el programa electoral de su coalición busca que de forma "urgente" que la izquierda se convierta en "referente y bandera de lucha". "Justicia social frente a una Europa clasista, impulsada por las políticas impuestas por la troika o implementadas con gusto y saña por algunos estados de la Unión Europea". Fueron palabras que pronunció en un discurso el pasado domingo en San Sebastián.

Las encuestas señalan un avance de las opciones radicales a ambos lados, aunque mayor en la ultraderecha. Si en las pasadas elecciones obtuvieron 37 escaños, ahora podrían lograr 90. En el caso de la fuerzas de izquierda radical, en las pasadas elecciones llegaron a 35 y ahora los sondeos les dan 57. Aunque puede que sean más escaños, puesto que en el grupo donde están representados los planteamientos de la izquierda más radical– GUE- NGL no estará incluido la coalición de Beppe Grillo.La crisis y la incompetencia política, caldo de cultivo de los radicalismos

¿Por qué suben estas formaciones? La investigadoraSonia Piedrafita, delCentro Europeo de Estudios Políticos en Bruselas,señala que la crisis, la incompetencia política han sido caldo de cultivo para estos partidos. En el caso de la ultraderecha, que se espera que registre un resultado récord, Marine Le Pen es la dirigente que ha catapultado esta opción, con un discurso en Francia de fuerte componente de identidad nacional y al mismo tiempo crítico con la estructura de poder y los sacrificios que la población ha tenido que hacer con la crisis. "Marine mide más sus palabras que por ejemplo la ultraderecha de Wilder, aunque tiene los objetivos bastante claros".

El Frente Nacional ha logrado penetrar en el electorado de barrios industriales y comunidades de tradición obrera por su lenguaje crítico con las política de ajuste y con el discurso 'ni-ni', ni el Partido Socialista de François Hollande ni el centro-derecha de la UMP. El programa populista se ha colado en un contexto de desapego a los actuales dirigentes en Francia, con escándalos como las escuchas del expresidente Nicolas Sarkozy, y el cambio de rumbo de la política socialista de François Hollande.

En Italia, el ascenso de Grillo se explicó por un deseo de parte del electorado italiano de cambiar radicalmente de rostros políticos, tras un Gobierno de un tecnócrata colocado por Europa, el de Mario Monti, y el hartazgo de los escándalos deBerlusconi.