FRONTEX PREVÉ QUE LA RUTA DE LOS REFUGIADOS PUEDA DESVIARSE HACIA EL MEDITERRÁNEO ESPAÑOL

El jefe de la Jefatura de Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil, Juan Luis Pérez, reconoció hoy que las previsiones de la Agencia Europea encargada de la gestión en las fronteras exteriores de la UE (Frontex) muestran que los flujos de inmigrantes y refugiados procedentes de Siria, Libia e Irak podrían desviarse hacia el Mediterráneo occidental.
Pérez participó esta mañana en la presentación de las operaciones ‘Indalo’ y ‘Hera’, encargadas del control migratorio del Mediterráneo español y del Atlántico en su frontera con las Canarias, en un acto al que también acudieron el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y el director adjunto operativo de la Benemérita, Cándido Cardiel.
Según José Luis Pérez, aunque se ha detectado un “aumento en cifras relativas” de inmigración hacia las Islas Canarias, este “no es preocupante”. “El problema es, una vez que se ha cerrado el Mediterráneo Oriental, cómo va a afectar esto a la entrada a Europa por nuestro lado del Mediterráneo”, explicó.
A este respecto, Cardiel señaló que para saber si los flujos migratorios de Grecia e Italia se han movido a España “la nacionalidad” es el factor clave para determinar si ha habido variaciones, y de momento a España los inmigrantes llegados por agua “siguen siendo subsaharianos” y no sirios o libios.
‘INDALO’ Y ‘HERA’
Sobre las operaciones de control en las aguas, que tienen especial actividad durante los meses de verano, Arsenio Fernández de Mesa se preció de anunciar que si en 2006, año en el que se inició la operación ‘Indalo’, la entrada “vía marítima era de 39.180 inmigrantes, esta cifra ha bajado a 5.800 en 2016”.
El director general de la Benemérita afirmó que estos datos responden a la labor “importante” de control de las aguas, pero también a un “trabajo de cooperación con Argelia y Marruecos”, países de origen tradicionales de los inmigrantes que llegan vía marítima.
Fernández de Mesa valoró como “muy buenos” estos procedimientos multinacionales (en el caso de ‘Indalo’ colaboran Bélgica, República Checa, Letonia, Noruega, Polonia, Suecia, Portugal, Francia y Rumanía, además de España) que sirven para controlar “la inmigración ilegal” y para luchar contra delitos como el tráfico de drogas.

Mostrar comentarios