Francisco ha hecho estas consideraciones en un discurso dirigido a los participantes de la sexta edición del Forum internacional "Migración y Paz", que concluye este miércoles 22. El evento depende del dicasterio del Servicio al Desarrollo Humano Integral, del Scalabrini International Migration Network (SIMN) y de la Fundación Konrad Adenauer.
Francisco ha reiterado así su mensaje de acogida y protección a los inmigrantes "en particular a quienes huyen de la guerra que -según ha explicado- deberían ser recibidos de manera "responsable y digna".
"Frente a este rechazo, que surge en última instancia en el egoísmo y es amplificado por la demagogia populista, urge un cambio de actitud, para superar la indiferencia y para contrarrestar los temores con un generoso recibimiento para aquellos que vienen a golpear nuestra puerta", ha señalado el Pontífice.
De esta manera, ha abogado por la apertura de "canales humanitarios accesibles y seguros", para que aquellos que "huyen de la guerra y de persecuciones terribles con frecuencia atrapados en organizaciones criminales sin escrúpulos" lleguen sanos y salvos. Además, ha recordado a la parte más vulnerable de los migrantes "los niños y adolescentes que se ven obligados a vivir lejos de su tierra natal separándose del afecto familiar".
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