China y Nueva Zelanda firman diez acuerdos bilaterales

Sídney (Australia), 20 nov.- El presidente de China, Xi Jinping, dijo hoy en Wellington que las relaciones entre su país y Nueva Zelanda están en "muy buena forma", durante una visita en que se firmaron diez acuerdos bilaterales, informan medios locales.

Xi se encuentra en Nueva Zelanda como parte de una gira oficial por Oceanía que comenzó en Australia, donde participó en la cumbre del G20 y visitó varias ciudades, y que lo llevará mañana a Fiyi.

En una rueda de prensa junto a Xi, el primer ministro neozelandés, John Key, dijo que los dos países, que ya tienen un acuerdo de libre comercio desde 2008, acordaron caracterizar la relación bilateral como una Amplia Asociación Estratégica.

El primer ministro neozelandés celebró el "gran papel que los ciudadanos chinos que se han convertido en neozelandeses tienen en el país" y confió en llevar los lazos bilaterales "a un nivel más alto".

"Hay mucho más por hacer, es más amplia y más profunda", comentó Key, al destacar que el hecho de acordar una amplia asociación es "un gran signo de madurez entre los dos países en los últimos 42 años", cita el portal de periódico "New Zealand Herald".

Entre los acuerdos firmados se incluye el reconocimiento mutuo de las calificaciones universitarias, la creación de un programa de supervisión alimentaria conjunta o un acuerdo de cooperación en la Antártida, entre otros.

También se extendió el sistema de visados de trabajo para turistas chinos con el fin de permitirles que trabajen para un solo empleador hasta por un período de seis meses, según la cadena neozelandesa "TVNZ".

XI fue recibido con honores de Estado en la Casa de Gobierno, en donde le dio la bienvenida el gobernador general de Nueva Zelanda, Jerry Mataparae, además de recibir los tradicionales saludos maoríes "powhiri", que incluye un roce de narices, y el "haka".

En las afueras del recinto oficial había casi un centenar de personas agitando las banderas chinas y neozelandesas, además de un puñado de simpatizantes del movimiento Falun Gong, una práctica espiritual prohibida en China, según informó el rotativo.