En una carta dirigida al director del FBI, James Comey, los demócratas han solicitado que se investigue si "la relación entre altos cargos de la campaña de Trump y los intereses de Rusia han contribuido a estos ataques para interferir con las elecciones a la presidencia de Estados Unidos".
Los firmantes de la misiva han señalado que las acciones "públicas y encubiertas" de los altos cargos de la campaña de Trump en nombre de los intereses rusos han planteado "serias preocupaciones".
Con esta afirmación han querido hacer referencia a las informaciones que apuntan a las relaciones entre algunos asesores de Trump con Rusia. Los legisladores han mencionado al asesor Roger Stone, que admitió a principios de agosto haberse puesto en contacto con el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a Carter Page, que viajó a Moscú y a Michael Flynn, quien comió el año pasado en la mesa de Vladimir Putin.
Los demócratas que han plasmado su firma en la carta también han expresado cierta preocupación por Paul Manafort, quien fue jefe de campaña de Trump hasta su dimisión tras conocerse sus negocios con oligarcas y partidos ucranianos alineados con Rusia.
"No sabemos si las declaraciones públicas de Donald Trump o si las conexiones de sus responsables de campaña con intereses rusos han llevado, directa o indirectamente, a los ciberataques contra organizaciones del Partido Demócrata, pero hay un acuerdo generalizado de que Estados Unidos debería tomar las medidas necesarias para impedir a Rusia que interfiera en nuestro proceso electoral", han señalado en la carta.
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