Para ello, el Ayuntamiento de Abadiño modificará de forma puntual las Normas Subsidiarias para recalificar, como suelo urbano de uso comercial y terciario, un área de 31.973 metros cuadrados de terreno no urbanizable localizada en Murueta, según ha explicado el alcalde, José Luis Navarro.
Mercadona y Lidl prevén contratar a 80 trabajadores, 40 en cada una de las dos empresas. En este sentido, Navarro ha pedido ya a estas compañías que hagan lo posible por incorporar a sus plantillas a trabajadores y trabajadoras del municipio.
Aunque en principio estas empresas no han fijado fecha de apertura, el primer edil ha indicado que Mercadona prevé abrir a lo largo de 2017. "La instalación de estas empresas es positiva para el municipio, sobre todo por el número de puestos de trabajo que van a crear. Pero también porque la zona va a quedar urbanizada y, porque la actividad de estas compañías generará ingresos para el Ayuntamiento", ha destacado el alcalde en un comunicado.
UNA TERCERA FIRMA
Además de las parcelas que serán ocupadas por Lidl y Mercadona, la unidad de ejecución reservará un área de 1.974 metros cuadrados para la instalación de una tercera firma comercial. La edificabilidad máxima de la unidad de ejecución será 9.958,84 metros cuadrados, con una ocupación del 70%.
Los centros comerciales previstos tendrán edificios con planta baja y dos alturas -el máximo permitido son doce metros-. Además, contarán con aparcamientos de vehículos, con un mínimo de 0,35 plazas por cada 25 metros cuadrados construidos.
Las obras permitirán urbanizar el entorno, con la habilitación de 5.484 metros cuadrados de espacios libres. En medio de la unidad de ejecución, se encuentra un tramo del antiguo trazado de Euskotren, que dejó de ser utilizado tras el soterramiento de la vía y que deberá ser desafectado. La modificación de las Normas Subisidiarias requerirá, además, de la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Durango.
En el próximo pleno municipal, el Ayuntamiento de Abadiño aprobará la puesta en marcha de un plan de participación ciudadana, requerido por ley, previo a la aprobación inicial del cambio urbanístico. Este plan contempla informar a la ciudadanía sobre este cambio urbanístico mediante distintas actuaciones, como la difusión de folletos divulgativos y una charla. Tras este primer paso, la propuesta será remitida al consejo asesor de planeamiento urbanístico, que emitirá un informe no vinculante sobre el cambio previo a la aprobación por el pleno.
La modificación puntual de las Normas Subsidiarias de Abadiño en este ámbito viene acompañada por un estudio del impacto generado por la nueva superficie comercial en el tráfico de la zona. El informe sostiene que el aumento de circulación que generen las nuevas actividades comerciales incidirá de forma "poco significativa" en la red de carreteras del entorno, ya que son de "alta capacidad".
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