Parlamento no localiza a los dueños de Ecomasa para requerirles que acudan a la comisión de investigación

EUROPA PRESS
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Los servicios del Parlamento de Cantabria están teniendo "problemas" para localizar a los propietarios de Ecomosa, Andrés de León y Jesús Lavín, y que reciban los requerimientos necesarios para acudir a la comisión de investigación que se está celebrando en la Cámara en torno al fallido proyecto y a la que ambos empresarios han sido citados, al igual que Diego Recio, exdirector de Teka, que tampoco ha sido localizado y que está igualmente llamado a declarar.

Así se lo ha comunicado este jueves el presidente de la comisión, el diputado del PRC Fernando Fernández, a los portavoces de los grupos, con quienes ha acordado, ante la imposibilidad de dar con los tres empresarios citados y hasta que se localicen sus "domicilios habituales", adelantar comparecencias previstas.

De este modo, el próximo martes, 22 de noviembre, acudirá al Parlamento el exdirector del Instituto Cántabro de Finanzas, Jorge Gómez de Cos, y a continuación, en los días sucesivos -a excepción del jueves 24, en el que no habrá comparecencias- desfilarán el resto de personas citadas por estar implicadas en la firma del acuerdo del ICAF con Ecomasa, que recibió 18 millones de euros de dinero público durante el anterior Gobierno del PP.

Por su parte, De Andrés y Lavín rubricaron con Recio el contrato para que el centenar de trabajadores que iban a ser echados de TEKA fueran recolocados en la fábrica de estufas camarguesa, para lo cual los empleados tuvieron que aportar el dinero percibido como indemnización por su despido, que sumaba cerca de 3,2 millones de euros.

El objetivo de este cambio y retraso en las comparecencias es, según ha comentado Fernández con los diputados que han participado en la comisión, que haya tiempo "suficiente" para localizar a los empresarios citados y entregarles el correspondiente requerimiento.

Este jueves, en la tercera jornada de comparecencias de la comisión de investigación, ha sido interrogado el director general de Hergom, Luis Aguilar, y aunque también estaba llamada la consejera y apoderada de esta empresa, María del Mar Gómez Casuso, no ha podido hacerlo, por encontrarse en Madrid. Tras excusar su presencia a través de una carta, que ha leído Fernández, el Grupo Mixto que había solicitado su presencia ha declinado volverla a citar para otro día. Y también a petición de Ciudadanos, se ha retirado la comparecencia de la exdirectora de Trabajo del anterior Ejecutivo, María Ángeles Sopeña, que había sido solicitada por la formación naranja.

ECOMASA TUVO IMPACTO, AUNQUE MÍNIMO, EN HERGOM

En cuanto a la declaración de este jueves, Aguilar ha admitido, a preguntas de los distintos parlamentarios, que la puesta en marcha de Ecomasa sí tuvo un "impacto" en Hergom, aunque "muy pequeño" -"mínimo", ha apostillado-. A lo largo de su declaración, ha señalado que la fábrica de Maliaño afectó "algo" a la firma que él dirige, aunque según ha asegurado es "imposible" medir cuánto.

En todo caso, ha indicado que esa afección podría ser de entre un 0% y 2% de las venta -"que ya es bastante grave", ha ilustrado al respecto- ya que las estufas de pellets que se producían en Camargo representaban cerca de 5-10% del negocio de Hergom, que por contra está "muy diversificado".

En respuesta a las preguntas formuladas por los diputados de los diferentes grupos con representación en la Cámara, Aguilar ha indicado que el mercado del pellets está muy relacionado con el precio de la energía y especialmente del petróleo, por lo que este factor debería, a su juicio, haberse incluido en el plan de viabilidad y de negocio del proyecto para la puesta en marcha de Ecomasa, algo que no se hizo.

De todas formas, el directivo de Hergom ha precisado que cuando la planta de estufas camarguesa arrancó el pellets era "viable", aunque "no" lo es en la actualidad. Y cuando en 2015 ofrecieron a su empresa la posibilidad de adquirir Ecomasa, Aguilar ha sentenciado que no la hubiera comprado ni por "un euro", ni tan siquiera "regalada", porque en ese momento ya se había producido la crisis del petróleo y el sector del pellets estaba "para salir huyendo de él". Además, para efectuar una operación así, la empresa debe ser "viable y rentable", y a sus ojos la planta de Camargo no lo era.

Según ha indicado, no conocía a De León, aunque él llegó a Hergom para "sustituirle". Aguilar se enteró del nuevo cargo de este empresario y de la puesta en marcha de Ecomasa "por los periódicos". Y ha confesado al respecto que la reacción inicial fue de "preocupación", e incluso de "miedo", por la información que tenía y las ventajas competitivas que esto acarreaba, más si se tiene en cuenta que el empresario se marchó a una fábrica de nueva creación que contó además "con la ayuda" del Gobierno.

Sin embargo, en Hergom se mantuvieron al margen de esta cuestión por un "tema emocional", ya que se trataba del futuro de los trabajadores de TEKA, de la que en el pasado surgió Hergom, que ya cuenta con 50 años de experiencia y que en los últimos tiempos no ha aumentado la plantilla pero la ha mantenido, "que no es poco", ha valorado Aguilar.

Tras indicar que las "tres claves del éxito" de un proyecto son tener un buen producto, contar con clientes y el dinero -que es "importante" pero no "lo fundamental"-, se ha referido a las ayudas públicas que percibió Ecomasa y las ha comparado con algunas de las que se ha beneficiado Hergom en los seis años que lleva él al frente, y que han llegado a un máximo de 200.000 euros, correspondientes al 30% de una inversión de 600.000. De todas formas, el directivo no ha querido valorar si el desembolso en la fábrica de estufas fue "correcto" o "excesivo".

También ha considerado para finalizar que a su empresa no le han dado nunca "un crédito de 5 millones de euros" con un "power point de 15 hojas", en alusión al documento sobre el que se sustentó la viabilidad de Ecomasa, tal y como indicaron los administradores concursales en la primera jornada de comparecencias de la comisión de investigación.

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