La misa ecuménica del Papa, sin masificaciones y con poca vigilancia

  • El punto culminante de la visita del Papa a Estambul, la misa ecuménica realizada junto al patriarca ortodoxo Bartolomé I, se ha desarrollado con una asistencia reducida de personas y con escasas medidas de seguridad.

Estambul, 30 nov.- El punto culminante de la visita del Papa a Estambul, la misa ecuménica realizada junto al patriarca ortodoxo Bartolomé I, se ha desarrollado con una asistencia reducida de personas y con escasas medidas de seguridad.

El despliegue policial era notablemente menor que el efectuado durante la visita a Santa Sofía, no se veían agentes armados y los chequeos a la prensa eran rápidos y a veces casi simbólicos.

El coche del Papa, un sencillo Renault Symbol, sin placas pero con la bandera del Vaticano, quedó aparcado ante la iglesia, sólo custodiado por el chófer que dormitaba en su interior.

A diferencia de lo ocurrido ayer y el viernes en Ankara, no hubo cambios en el recorrido de los transportes públicos de la zona ni incidencias en el tráfico.

Quizás debido a la fina pero insistente lluvia, tampoco hubo prácticamente fieles o curiosos que intentasen ver pasar el vehículo papal o vitorearle.

Si ayer, la catedral del Espíritu Santo, donde el Papa dio una misa católica, estaba llena a rebosar, hoy sobraba espacio en la pequeña iglesia ortodoxa de San Jorge, situada a un escaso centenar de metros de la orilla del Cuerno de Oro.

Pese a su reducido tamaño y su aspecto poco llamativo, que desde fuera apenas permite adivinar que se trata de una iglesia, la catedral de San Jorge es el templo ortodoxo más prestigioso de Estambul y sede permanente del Patriarcado.

Aquí, el patriarca dice la misa más festiva del año, la de la Epifanía, que incluye el rito de lanzar un crucifijo a las aguas del Cuerno de Oro, un acto que cada año atrae a miles de fieles, turistas y curiosos de Grecia.

Pero la misa ecuménica de hoy parece más bien parte de un diálogo íntimo entre Francisco y Bartolomé, ambos decididos a impulsar el acercamiento entre las dos Iglesias en vistas de una futura reunificación.

Al igual que en las anteriores visitas papales a Estambul, la misa compartida se celebra un 30 de noviembre, día de San Andrés, el patrón del Patriarcado ecuménico.

Como recuerda una oración difundida durante estos días en forma de postal en las iglesias católicas de Estambul, San Andrés y San Pedro, venerado en Roma, no sólo eran los dos primeros apóstoles de Jesucristo sino, además, hermanos.

Mostrar comentarios