"Es algo estupendo. Estoy muy satisfecho. Si no hubiera sido invitado aquí, sólo habría comido un bocadillo (sándwich)", declaró Francisco López, de 67 años.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, una exmagistrada de 71 años de edad, excomunista integrada a la formación Ahora Madrid asociada a Podemos, abrió las puertas del palacio de Cibeles a los indigentes.
Carmena, que también fue una ferviente activista de los derechos laborales durante la dictadura del general Francisco Franco, se integró a la cena.
"Navidades felices, mucha felicidad a todos, y en este día, paz. Paz en todo, en lo diario, en lo más pequeño y en el mundo. Por la paz y por el padre Ángel", dijo Carmena, refiriéndose al sacerdote Ángel López, presidente de la ONG Mensajeros por la Paz que estuvo detrás de esta iniciativa.
Una empresa de taxis local ofreció el transporte gratuito a los invitados a la cena, quienes se distribuyeron en 22 mesas dispuestas bajo la claraboya de cristal del patio principal del ayuntamiento.
En el patio resplandecía un árbol de Navidad ecológico fabricado con cajas de cartón y coronado con una estrella hecha de botellas de plástico.
El cura Ángel García, fundador de la organización Mensajeros de la Paz, dijo que esta es una oportunidad de dar amor.
"Es hacer felices a estas personas, darles amor y cariño, y que al menos una vez al año, y algunos, por primera vez en su vida, pueden sentarse en una mesa con flores, con servilletas rojas", afirmó.
En la cena no hubo alcohol, pero además del agua y las gaseosas se brindó con "Champín", un líquido dulce con burbujas que en España se le da a los niños en las fiestas.
Unos 60 voluntarios sirvieron las mesas y ayudaron a preparar la comida, sacrificando la Navidad en familia.
"Es mejor así. Cuando eres más afortunado, tienes que ayudar" dijo Andrea Fernández, una voluntaria de 16 años.
Al final de la cena se distribuyó el tradicional turrón que los españoles comen en estas celebraciones.
En Madrid hay cerca de 1.900 personas sin hogar, según las cifras de la municipalidad. Cerca de 40% vive en la calle, mientras que el resto duerme el albergues.
Carmena lleva a cabo desde su elección políticas progresistas, que se contrastan fuertemente con su predecesora, Ana Botella, casada con el expresidente del gobierno del Partido Popular, José María Aznar.
Mientras que Botella afirmó que las personas sin techo constituían "una dificultad agregada" para los servicios de limpieza, Carmena ha llevado a cabo además asistencia legal para las familias que enfrentan un desahucio por no poder pagar sus hipotecas tras el estallido de la burbuja inmobiliaria.
También ha emprendido otras reformas en la alcaldía, como cambiar los nombres a 30 calles que hacían referencia a la dictadura de Franco.
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