Renuncia del papa fue "por amor a la Iglesia", dice obispo ecuatoriano

Quito, 11 feb.- La renuncia del papa Benedicto XVI fue una decisión "valiente" que demuestra el "profundo amor a la Iglesia" por parte de un hombre "muy emblemático" que la ha dirigido con decisión y caridad, según dijo hoy a Efe el obispo ecuatoriano Julio Parrilla.

"Si él siente que sus fuerzas están debilitadas por la edad, por la enfermedad, y cree que debe de dar paso a otro pontífice, pues evidentemente es una decisión que me parece muy respetable", dijo Parrilla, obispo de Loja, quien dejará ese cargo en las próximas semanas para asumir el obispado de Riobamba.

El papa, que cumplirá 86 años dentro de dos meses, anunció hoy por sorpresa que renunciaba al pontificado por su "edad avanzada" y porque considera que no tiene fuerzas "para ejercer adecuadamente el ministerio petrino".

Parrilla, un sacerdote español de 66 años que lleva 22 de ellos en Ecuador, calificó a Benedicto XVI como "un hombre muy emblemático, muy seguro, con una doctrina clara, un hombre que ha gobernado con decisión y con profunda caridad".

Se trata de un anuncio histórico, dado que la renuncia más reciente de un sumo pontífice fue la de Gregorio XII, en 1415.

Por ello, Parrilla consideró que es "una decisión valiente, lúcida y evidentemente llena de sentido espiritual. No creo que él actúe por egoísmo, sino que al contrario creo que actúa por un profundo amor a la Iglesia".

El obispo aseveró que Benedicto XVI debe también estar consciente de que el pontificado "trasciende el ámbito de la propia Iglesia católica; hoy el papa es siempre un referente ético muy importante en la vida mundial".