Si bien el martes presentaba ciertas "mejoras" después de que los equipos médicos del Hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo le detectaran una trombosis venosa profunda en los miembros inferiores, a lo largo del miércoles su estado de salud ha pasado a ser calificado como "gravísimo" por el equipo médico que la trata.
"Las últimas dos horas han sido dramáticas", han explicado los sanitarios, en referencia a un período comprendido entre las 19.00 y las 21.00 horas.
Según los médicos, el cerebro de la ex primera dama presenta inflamación, después de una jornada en la que ha sufrido varios vasoespasmos. Si bien se le había retirado el tratamiento sedativo que la mantenía en coma inducido, desde el hospital han tomado la decisión de volver a administrárselo.
La mujer del expresidente brasileño, de 66 años, tuvo que ser sometida la semana pasada a una cirugía endovascular para reparar un aneurisma, tras ser hospitalizada con una hemorragia cerebral.
"La paciente Marisa Letícia Lula da Silva fue ingresada la tarde del martes con una hemorragia cerebral por ruptura de un aneurisma. Fue inmediatamente sometida a un tratamiento de emergencia, seguido de una cirugía endovascular y oclusión de aneurisma", indicó el hospital.
La ex primera dama ya estuvo internada en este mismo centro de salud ante la sospecha de que había contraído el virus H1N1, de acuerdo con el diario brasileño 'Folha'.
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