Osakidetza recomienda a los mayores y menores de edad hidratarse y protegerse del sol ante la ola de calor en Euskadi

Osakidetza recomienda a los mayores y menores de edad hidratarse y protegerse del sol ante la ola de calor en Euskadi
Osakidetza recomienda a los mayores y menores de edad hidratarse y protegerse del sol ante la ola de calor en Euskadi
EUROPA PRESS
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En un comunicado, ha recordado la conveniencia de adoptar, entre otras, diversas medidas de prevención, especialmente relevantes en el caso de los grupos de riesgo como personas con enfermedades crónicas, menores y personas mayores.

Entre esas medidas, están las de beber más líquidos de lo habitual, preferentemente agua, no esperar a tener sed para beber, evitar bebidas que contengan cafeína, alcohol o demasiado azúcar y consultar a su médico si le ha limitado la cantidad de líquido que puede beber o le ha recetado diuréticos.

En materia de alimentación se recomienda ingerir comidas ligeras como ensaladas, gazpacho, verduras o frutas, al tiempo que se recomienda cerrar ventanas y bajar las persianas sobre las que dé el sol.

Se aconseja igualmente aprovechar los momentos de menos calor para ventilar y refrescar la casa, así como usar ropa apropiada, holgada, ligera, de colores claros y calzado cómodo y fresco.

REFRESCARSE Y PROTEGERSE DEL SOL

Osakidetza recomienda también refrescarse y tomar duchas o baños fríos si se nota mucho calor e igualmente protegerse del sol y, durante las horas de más calor, procurar no salir a la calle, si no es necesario.

En este sentido, han aconsejado que si es necesario salir, se lleve la cabeza cubierta y se usen gafas de sol, se evite el sol y se busque la sombra. Han solicitado igualmente que se procure no hacer actividad física intensa y prolongada en las horas de más calor y que nunca se quede o deje a alguien en un vehículo estacionado y cerrado, aunque esté a la sombra.

Osakidetza recomienda cuidar de las personas más frágiles y prestar especial atención a bebés y niños pequeños, mayores y personas con enfermedades que puedan agravarse con el calor y la deshidratación, caso, por ejemplo, las enfermedades cardíacas.

En este sentido, han indicado que los ancianos, principalmente los que viven solos o son dependientes, pueden tener dificultades en adoptar medidas protectoras, por lo que deberían ser visitados, al menos, una vez al día por un miembro de la familia, amigo, vecino y, en su caso, solicitar la colaboración de los servicios sociales.

El Servicio Vasco de Salud ha aconsejado también mantener las medicinas en lugar fresco porque el calor puede alterar su composición y su efecto.

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