Este año el hospital ha llevado a cabo 55 trasplantes de riñón, de los que 14 han utilizado una técnica mínimamente invasiva: "Desde el verano pasado hemos hecho un salto importante y queremos continuar por este camino", ha explicado el jefe del Servicio de Urología del Clínic, Antonio Alcaraz.
Alcaraz ha destacado que la cirugía robótica es utilizada para los trasplantes renales de donante vivo, y el equipo médico opta por la cirugía abierta cuando se prevén "dificultades quirúrgicas".
El equipo de Alcaraz es grupo de referencia en la introducción de esta técnica en Europa por ser pioneros y por número de trasplantes llevados a cabo con el robot Da Vinci Xi.
"Gracias al compromiso de todo el equipo hemos podido situar al Clínic en la vanguardia europea y mundial del trasplante", ha afirmado el cirujano.
MÍNIMAMENTE INVASIVO
La cirugía mínimamente invasiva, que se puede llevar a cabo con cuatro pequeñas incisiones en el abdomen del paciente, disminuye el riesgo de complicaciones y favorece una rápida recuperación del paciente trasplantado.
El órgano se introduce o se extrae por la vagina en el caso de las mujeres o mediante una incisión de seis centímetros en el ombligo en el caso de los hombres.
En agosto de 2015 un equipo liderado por Alcaraz extrajo dos riños por nefrectomía transvaginal y los implantó en los receptores mediante cirugía robótica, usando el robot Da Vinci Xi.
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