La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, acompañada del consejero de Sanidad, Jesús Sánchez Martos, ha inaugurado este miércoles la nueva UCI, que tiene una superficie de 300 metros cuadrados y dispone de seis boxes aislados -dos para infecciosos y cuatro para pacientes neutropénicos (con las defensas bajas)-, además de ocho camas en salas.
La gran novedad de la nueva UCI es la presencia de la luz natural, que entra a través de grandes ventanales y que está estrechamente relacionada con la producción de la vitamina D y el estado anímico del paciente. Los niños oncológicos pueden llegar a pasar un mes en la UCI y sin luz natural no pueden distinguir el día de la noche y pierden la noción del tiempo.
Todos los espacios dentro de la UCI están separados por tabiques transparentes de vidrio para facilitar la entrada de esa luz natural. Además, se emplea iluminación de bajo consumo dentro del plan de ahorro energético de la Consejería de Sanidad.
La antigua unidad contaba con dos boxes para pacientes en aislamiento. La nueva UCI cuenta con seis boxes con presión positiva y negativa para los pacientes infecciosos. Además, dispone de un equipamiento tecnológico más avanzado y un control central de vigilancia para el personal de Enfermería.
La Fundación Aladina ha llevado a cabo la reforma integral de esta Unidad de Cuidados Intensivos, cuyo coste ha sido de 1.500.000 euros y que cuenta con la última tecnología, luz natural y una mayor comodidad para las familias que acompañan a los pacientes. El presidente de la Fundación, Francisco Arango, y el director gerente del Niño Jesús, César Gómez, han acompañado a la presidenta regional en la inauguración.
"Esta reforma es resultado, por una parte, del compromiso de la sociedad civil madrileña; y por otra, de la política del Gobierno regional en favor de una sanidad pública, gratuita, universal y de la máxima calidad", ha indicado la presidenta regional, que además ha valorado "la alta cualificación y la abnegación de los profesionales que tienen la vida de estos niños en sus manos".
Cifuentes ha indicado que esta nueva instancia es "un sueño hecho realidad" que además, se ha hecho en "muy poco tiempo".
Ha agradecido la colaboración de la Fundación Aladina señalando que "sumando se llega más lejos" y ha destacado que salvar vidas de niños es una de las cosas "más duras pero más gratificantes de la profesión sanitaria".
ATENCIÓN DE VANGUARDIA EN LA SANIDAD MADRILEÑA
El Servicio de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Infantil Niño Jesús funciona desde hace 35 años. Está atendido por facultativos especialistas, enfermeras y auxiliares de enfermería expertos en el diagnóstico y tratamiento de niños críticamente enfermos.
En esta UCI se atiende a pacientes con gran variedad de patologías médicas y quirúrgicas y, desde su creación, se ha caracterizado por ser un servicio de puertas abiertas donde los padres pueden estar cuidando y acompañando a su hijo.
En este Servicio ingresan cada año alrededor de 700 pacientes y se atiende, no sólo a niños graves que acuden a urgencias o están ingresados en el mismo hospital, sino también a pacientes procedentes de otros hospitales con Servicios de Pediatría que no cuentan con UCI pediátrica, tanto de la Comunidad de Madrid como de otras Comunidades Autónomas.
Los hospitales públicos de la Comunidad de Madrid cuentan con siete unidades de cuidados intensivos pediátricos que disponen de un total de 67 camas, lo que supone cerca del 25 por ciento del total de las camas de intensivos pediátricos repartidas por toda España.
En Madrid, se suman a la unidad del Hospital Niño Jesús las de los hospitales Ramón y Cajal, Gregorio Marañón, Clínico San Carlos, 12 de Octubre, La Paz y la Fundación Jiménez Díaz. Durante el año 2015 en estas unidades se atendieron un total de 2.966 pacientes.
Asimismo, durante el pasado año la Comunidad de Madrid destinó 100 millones de euros en sus centros sanitarios para mantenimiento, mejora de infraestructuras y equipamiento de última tecnología en sus instalaciones sanitarias. Todo ello con el fin de permitir a los profesionales ofrecer una sanidad cercana y acorde a las necesidades de cada paciente.
El concepto de UCI de puertas abiertas está contemplado en el Plan de Humanización de la Asistencia Sanitaria de la Comunidad de Madrid y tiene como objetivo hacer más amable la estancia de los pacientes en las unidades de críticos favoreciendo el contacto y la relación de familiares con el paciente durante su estancia en la UCI. Medidas como la flexibilización y ampliación de los horarios de visita, según las necesidades y situación de los pacientes, generan beneficio tanto en pacientes y familiares como en los profesionales que les atienden en dichas unidades.
En este sentido, Cifuentes ha destacado además el nuevo Plan de Urgencias y Emergencias de la Comunidad de Madrid, aprobado el pasado mes de agosto, que establece un protocolo de atención del paciente pediátrico y la incorporación de un pediatra en todas las actuaciones para tener en cuenta las necesidades específicas que puede presentar este colectivo de pacientes, así como los profesionales que prestan su atención en este ámbito.
Asimismo, ha anunciado que desde este miércoles se encuentra operativa una nueva aplicación informática que facilita a los profesionales del Servicio de Urgencias el registro electrónico de toda la información clínica y la emisión de los informes, que ya se generan todos en formato electrónico.
Este es un paso previo a la implantación completa de la Historia Clínica Electrónica, proyecto en el que el hospital ya se encuentra inmerso.
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