Una manifestación a la que han acudido cientos de personas para reclamar una sanidad pública de mayor calidad. La portavoz de la Mesa en Defensa de la Sanidad, Carmen Esbri, ha asegurado que "siguiendo el hilo conductor de nuestra lucha por la sanidad pública, hemos venido a denunciar cómo nos están derrumbando la sanidad de una manera evidente".
Esbri ha considerado que "se han ido produciendo muchos deterioros, caídas de techos e inundaciones", incluso la falta de presupuesto ha provocado que "gente se haya tenido que llevar al hospital mantas y calentadores porque fallaba la calefacción".
La portavoz de la Mesa en Defensa de la Sanidad ha asegurado que "los recortes van a producir un deterioro progresivo e irrecuperable. El dinero se está yendo a la sanidad privada, que ha recibido 600 millones más desde el año 2003 hasta el año 2015, según un estudio de Comisiones Obreras", ha especificado.
Unos recortes que no mejorarían las infraestructuras de hospitales y centros de salud, y que podría suponer un problema, según ha informado Esbri, que defiende que la "realidad es que cualquier caída de un techo podría provocar accidentes y muertes".
Antonio, uno de los manifestantes, ha lamentado que "por desgracia en este país la gente no tiene el capital suficiente para poder permitirse ciertos tratamientos o el acceso a la sanidad privada, por eso vale la pena luchar".
Otra de las manifestantes, Luz, ha realizado un llamamiento para que mejoren las condiciones de los trabajadores, y que "se haga un esfuerzo para reforzar las plantillas de los hospitales. "Da pena verlos trabajar al cien por cien y ya no pueden más", ha apostillado.
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