El SMS ahorra 1,5 millones de euros gracias a la compra centralizada de marcapasos

  • El Servicio Murciano de Salud (SMS), dependiente de la Consejería de Sanidad, ha logrado desde 2012, año en el que se publicó el primer concurso para la compra centralizada de marcapasos, y hasta el pasado 2016 un ahorro acumulado de 1.500.000 euros respecto al proceso de compra ordinario.
El SMS ahorra 1,5 millones de euros gracias a la compra centralizada de marcapasos
El SMS ahorra 1,5 millones de euros gracias a la compra centralizada de marcapasos
EUROPA PRESS
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El primer contrato para la compra de marcapasos a través de la unidad centralizada de compra y aprovisionamiento, que se puso en marcha en 2010, se realizó en 2012, prorrogándose dos años más, esto es, hasta 2016. Durante dicho periodo el SMS invirtió alrededor de 2.500.000 euros anuales para dotar a la red de centros del SMS de marcapasos.

El objetivo del SMS mediante la compra centralizada es continuar mejorando su estrategia de eficiencia, equidad de acceso a las prestaciones y homogeneización de recursos en las nueve Áreas de Salud del mapa sanitario regional.

Ahora, el SMS publicará el concurso, por segunda vez consecutiva, para proceder a la compra centralizada de este material con la finalidad de abastecer sus centros durante los años 2017 y 2018, que también será prorrogable durante dos años más.

De este modo, el SMS destinará 6.127.000 euros para la adquisición de marcapasos durante los dos próximos años mediante compra centralizada, con lo que se podrá alcanzar un ahorro estimado durante dicho periodo de 509.142 euros.

Los profesionales del SMS implantan cada año cerca de mil marcapasos en pacientes de la Región que presentan alguna anomalía en el ritmo cardíaco, para corregir frecuencias del corazón anormales.

Y es que, este dispositivo, previo diagnóstico e indicación clínica, suele ser la mejor terapia para pacientes con bradicardia, esto es, que presentan frecuencia cardíaca lenta.

La intervención para implantar el marcapasos suele realizarse bajo anestesia local, suele durar entre 30 minutos y dos horas, dependiendo del grado de complejidad. Si todo el proceso transcurre de forma idónea, los pacientes vuelven a casa uno o dos días después del implante.

Tras la intervención, los pacientes deben pasar revisiones periódicas para comprobar que el dispositivo está funcionamiento correctamente. Estas revisiones pueden realizarse en el hospital o bien, en aquellos casos en los que el paciente vive lejos, los facultativos pueden recurrir a la revisión remota para evitar desplazamientos y agilizar el proceso.

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