Así lo ha trasladado el primer edil durante su visita el inmueble que será remodelado por la empresa Albaida Infraestructuras, a la que se adjudicaron los trabajos por 1,5 millones de euros. El regidor ha señalado que "el mundo de la cultura almeriense" cuenta con "insignes nombres" que podrían cumplir con el cometido de dar nombre al edificio.
Fernández-Pacheco, ha defendido que "lo más sensato y coherente" pasa por que los ciudadanos puedan decidir "cómo se llama su biblioteca", que quedará empazada en el "histórico edificio" obra de Guillermo Langle. "El ayuntamiento va a dar cumplida cuenta de una necesidad y demanda con una infraestructura educativa", ha añadido.
La obra cuenta con un tiempo de ejecución de 15 meses y tendrán que ceñirse al proyecto ganador del concurso de ideas 'Tri_teca', con el que se da protagonisa a estancias de mediateca, bebeteca, estudio o salón de actos.
La futura Biblioteca Central Municipal contempla espacio para sala de lectura, sala infantil, vestíbulo, hemeroteca, mediateca, sala para albergar fondos bibliográficos antiguos, depósito con estanterías, salón de actos e incluso de una sala de servicios múltiples. Además de zona administrativa, el pliego reserva un diez por ciento de la superficie para usos complementarios.
El edificio tiene una superficie construida de más de 2.000 metros cuadrados y está catalogado desde el año 1986 en grado 2 y constituye la más importante y mejor conservada obra del racionalismo almeriense de preguerra.
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