"Internet es un monstruo omnívoro que lo devora todo y también se ha cargado las industrias culturales. En la literatura vivimos un momento muy turbulento con elementos no domesticados y todo lo que parecía muy sólido está cayendo: ya no hay ocio, hoy en día puedes estar todo el día trabajando y solo paras cuando duermes", ha señalado en una entrevista con Europa Press.
Precisamente, por esa falta de industria, Mañas cree que intentar vivir hoy en día de la literatura es "un desastre". "Si no hay una base, todo lo demás se te viene abajo: la literatura ha sido siempre un oficio de rentistas. En mi caso, he tenido mucha suerte porque el cine me ha complementado la labor de escribir", ha recordado.
En este sentido, el autor observa expectante el uso de algunas herramientas en Internet como Twitter, donde surgen 'booktubers' con miles de seguidores o "los buenos tuiteros se convierten en aforistas". "Si Gómez de la Serna viviera hoy, nos freiría a 'tuits'", ha aseverado con humor.
En cualquier caso, 'Un escritor en la era de Internet' no solo es una mirada a la irrupción de Internet en las artes, puesto que su autor también reflexiona en numerosos piezas sobre la literatura. Kant, Joyce o Cervantes son algunos de los nombres que aparecen en esta obra y, en muchas ocasiones, no salen bien parados. "He jugado a ser provocador", ha señalado.
HISTORIAS DEL KRONEN
Mañas fue un escritor que alcanzó el éxito en los años 90 --cuando aún estaba en la veintena de edad-- gracias a novelas como 'Historias del kronen' o 'Mensaka', que fueron adaptadas al cine. "En realidad, me salté un escalafón en la carrera literaria, no fue ideal como la de Lorenzo Silva, por ejemplo: cargué mucho y he seguido cargando", ha señalado en relación a las críticas recibidas.
Pese a que no cree que 'Historias del kronen' sea su "mejor libro", se siente "orgulloso" de cómo ha resistido el paso del tiempo. "Tiene muchos defectos, pero aguanta: siempre que lo hojeo, estoy acojonado, pero al final no creo que haya quedado obsoleto", ha señalado el escritor madrileño, quien reconoce no obstante que "no se escriben los libros que se quiere, sino los que se puede".
A día de hoy, el novelista se siente como "una contradicción con patas", llegando a afirmar en el libro que se ha "cambiado de acera" en relación a sus reticencias al clasicismo. "Siempre ha predominado en mí la parte romántica, pero de vez en cuando --y cada vez más--, me veo defendiendo el orden: en el fondo, un clásico es un romántico que ha aprendido su oficio", ha apuntado.
MAÑAS EDITOR
De momento, Mañas se ha mostrado ilusionado con su nueva aventura como editor, gracias al premio Nuevos Talentos -- una aventura junto al sello francés Nouvelles Plumes -- que permitirá descubrir a través de una plataforma a jóvenes autores inéditos cuyas obras serán votadas durante un cierto tiempo y las ganadoras podrán ser publicadas.
"El negocio editorial no me interesa, pero descubrir gente es una muestra de gratitud a lo que me permitió despegar: sin el premio Nadal --que no gané, por cierto, fui finalista--, hoy no estaría aquí", ha concluido, tras dejar abierta la posibilidad de descubrir al "autor de la nueva generación". "El talento no tiene rostro y es imposible saber quién lo tiene", ha terminado.
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