En la mencionada respuesta escrita, recogida por Europa Press, el consejero de Cultura contesta al PP que su departamento, al que está adscrito este edificio reformado a comienzos del siglo XX por el arquitecto sevillano Aníbal González para la familia Sánchez Dalp, acomete "regularmente actuaciones de mantenimiento y mejora, colocación de extintores, suministros de agua y electricidad, limpiezas, jardinería, fumigación y desinfección", en dicho monumento.
En cuanto al futuro del edificio, recuerda el consejero que el mismo está sujeto al convenio firmado en 2010 entre la Junta de Andalucía y el Gobierno central, para la ampliación de la sede del Museo de Bellas Artes de Sevilla, la segunda mayor pinacoteca de España. Este museo, recordémoslo, pertenece al Estado, pero su gestión está en manos de la Junta de Andalucía.
Respecto al mencionado convenio de 2010, defiende el consejero andaluz de Cultura que la Junta ha "cumplido las obligaciones suscritas, estando aún a la espera de la inversión y gestión que corresponden al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en virtud de dicho acuerdo y en el marco de sus competencias, para una ampliación muy necesaria y que supone un compromiso pendiente del Gobierno central con la ciudad de Sevilla y la ciudadanía andaluza".
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