Andrés Velencoso, el mejor apoyo de Kylie Minogue

  • La cantante afirma que el amor que en su vida le ha ayudado a encontrar la felicidad y a sentirse mejor consigo misma
Andrés Velencoso, el mejor apoyo de Kylie Minogue
Andrés Velencoso, el mejor apoyo de Kylie Minogue

La cantante australiana cumple este lunes 44 años en medio de un periodo de gran estabilidad personal en el que juega un papel muy importante el modelo español. Para la estrella del pop, Andrés es la persona en quien siempre puede confiar, que la tolera en los buenos y malos momentos pero, sobre todo, a la que puede aferrarse cuando se siente "desorientada"."Me he vuelto más sabia. Más tolerante, menos exigente. Ahora estoy muy feliz, porque Andrés respeta totalmente lo que soy. Tanto si me levanto resplandeciente como si me levanto ojerosa, da lo mismo. Y cuando me siento totalmente desorientada, cuando me hago mil preguntas sobre la vida, él está ahí", confesó en la revista Hoy Corazón.El próximo mes de julio, la pareja cumplirá cuatro años de sólido romance que han aportado tranquilidad y felicidad a sus vidas. La clave de esta exitosa relación sentimental está, según explica Kylie, en no establecerse grandes expectativas y disfrutar de la compañía mutua sin agobiarse por el futuro."Me siento a gusto en mi piel. Estoy curada y enamorada y eso ayuda. Andrés es guapo, agradable y muy fácil de llevar. No me doy cuenta de que voy a cumplir 44 años. El amor hay que trabajarlo cada día, Nunca he creído que el matrimonio sea la culminación de todo. Hay gente que piensa que una bella historia dura toda la vida. Yo me digo que durará el tiempo que dure. Es menos decepcionante", manifestó.El optimismo y sosiego que demuestra la diva últimamente son una consecuencia natural de la triunfal batalla contra un cáncer de mama que superó en el año 2005. Esta dura experiencia, aunque sigue presente en su vida cotidiana, le ha ayudado a darse cuenta de lo afortunada que ha sido tanto en su faceta artística como personal."Es suficiente con que me mire en el espejo: las cicatrices son morales y físicas. Hay días en que siento una rabia increíble y otros en los que pienso que, a pesar de todo, en mi desgracia, tuve mucha suerte. Tengo la sensación de haber tenido varias vidas. Y tanto en mi carrera profesional como en mi vida personal, he tomado las malas decisiones suficientes como para encontrarme en la ruina, pero al final no he salido tan mal parada", concluyó.

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