En un artículo de opinión, recogido por Europa Press, Sánchez enumera, de manera irónica, diez razones por las que la clase política no debe apoyar a las bibliotecas.
Señala en primer lugar, en 2015 en la región había 498 bibliotecas, "la segunda red autonómica por su número", sólo superada por Andalucía, que tiene ocho provincias.
Las bibliotecas de la región, según describe Sánchez, "recibieron en 2015 cerca de 6 millones de visitas (2,88 visitas por habitante)". La media de visitas por habitante es de 2,35, y Castilla-La Mancha, como en otros indicadores "figura entre las comunidades con más visitas".
Asimismo, indica que Castilla-La Mancha tiene "6,5 millones de documentos, con 3,18 documentos por habitante". "Castilla-La Mancha ha tenido una trayectoria envidiable en el período 1990-2009, pero en 2010 llegaron las vacas flacas y desde entonces sobrevivimos como podemos", ha afirmado.
Termina Sánchez destacando, de manera irónica, que "las bibliotecas públicas constituyen una verdadera amenaza para la sociedad y, fundamentalmente, para los poderes públicos". "Apoyan un modelo de convivencia más participativo y democrático y, sobre todo, generan una coalición entre la sociedad y las bibliotecas que hacen peligrar los privilegios de quienes hoy se han convertido en muchos casos en profesionales de la política, demasiadas veces olvidando que están al servicio real de los ciudadanos", ha concluido.
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