Botín cambia el traje por la mochila para recorrer Groenlandia en ‘Planeta Calleja’

Las aventuras de Jesús Calleja volvían a Telecinco y Cuatro este miércoles con una invitada de nivel: Ana Botín. La presidenta del Banco Santander protagoniza la primera entrega de ‘Planeta Calleja’ en 2020, que la ha llevado a recorrer el sur de Groenlandia. Con el objetivo de comprobar las consecuencias del calentamiento global, Calleja y Botín emprendieron una travesía de seis días en los que “la mujer más poderosa de España”, como así la describió el presentador, mostraba su faceta más personal.

“Este es uno de los ‘Planeta Calleja’ más curiosos que he hecho en mi vida”, afirmaba el presentador mientras esperaba a Ana Botín. La banquera se mostraba animada por lo que le esperaba en el viaje: "Me convenciste muy rápido". En la aventura también se ha embarcado Guillermo Morenés, el esposo de la cántabra. Ya en Groenlandia, Botín y Calleja se mostraban sorprendidos por los 14 grados de temperatura. Una de las primeras paradas ha sido la localidad de Qassiarsuk, donde Botín se ha sumergido en la cultura vikinga.

Aficionada al senderismo, la hija de Emilio Botín ha emprendido una ruta hasta alcanzar un pico montañoso rodeado de hielo continental. Desde lo alto, los dos han comprobado la disminución del hielo y la gran velocidad a la que se ha producido este deshielo. La siguiente parada era Tasiusaq, una población donde ha conocido a una familia del lugar que le ha invitado a probar una sopa propia de la zona.

Tras conocer algunas curiosidades del lugar y sumergirse en la cultura local, Calleja y Botín se han subido a un kayak para navegar entre icebergs, todo "un espectáculo", como describía la banquera. Sin embargo, los dos han sido testigos de las consecuencias del calentamiento global. "No podemos permitirlo", comentaba Calleja ante una concienciada Ana Botín.

Los 'exploradores' también han tenido que hacerse con un equipo de alpinismo para lanzarse a conocer la mayor masa de hielo presente en Groenlandia. Nada más llegar, han sido testigos de la formación de un río bajo los glaciares como consecuencia del calentamiento global. “Es espectacular, pero da pena”, comentaba Ana Botín. Ya sobre las lenguas de los icebergs, la banquera ha escalado hasta lo más alto, punto conocido como “el plató”. Aquí concluía la aventura, una experiencia que “ha valido la pena”, según admitía. "Estos días aquí me han hecho reflexionar sobre lo que tenemos por delante. Hay que empezar a tomar decisiones y a cambiar hábitos para modificar esta tendencia", afirmaba Botín.