Carlos Cuarón: Mi película es una "verdad azucarada" sobre violencia familiar

Paula Escalada Medrano

México, 21 oct.- La realidad siempre supera a la ficción y por eso para Carlos Cuarón su más reciente filme, "Besos de azúcar", es un retrato de la violencia intrafamiliar existente en muchos lugares de México, pero dulcificado con el toque de esperanza que permite dar el cine.

"Es un universo y una verdad muy honesta, un retrato social del México urbano contemporáneo, pero lo que nos tocó ver a todos los que nos metimos ahí es que la realidad es bastante más fuerte", contó a Efe en entrevista.

Tras recorrer varios festivales como el británico de cine independiente Raindance o el Internacional de Cine de Guadalajara (México), "Besos de azúcar" llegará a las salas de cine mexicanas el próximo fin de semana.

La película, el segundo largometraje de Cuarón como director en solitario, cuenta la historia de Nacho, un niño de 13 años que vive en una familia disfuncional y en un entorno social corrupto y violento.

En medio de su mundo complejo se enamora de Mayra, una niña que es hija de La Diabla, la líder de los vendedores callejeros de un barrio que, si bien no se dice en la cinta, es el barrio capitalino de Tepito, el escenario en donde se rodó la película.

"Después de haberme metido como me metí al centro histórico y a Tepito en especial, puedo decir que es una verdad azucarada", contó el cineasta, hermano del también director Alfonso Cuarón.

Y es que más allá del argumento del primer amor, la cinta trata sobre la "violencia intrafamiliar" que existe en algunos ambientes en México, ejercida a partir de pequeños golpes o con una "violencia verbal tremenda".

"Allá dentro ves lo que yo retrato pero bastante más intenso. Eso no quiere decir que (la película) no sea un retrato muy honesto, sí lo es, la gente se refleja, pero la realidad siempre supera a la fantasía, inevitablemente", contó.

Pese a esto, aseguró, la película es "divertida" y "luminosa de principio a fin", que "es lo que le gusta a la gente en general cuando va al cine".

"Por más que los protagonistas tengan que pasar por un túnel muy negro, muy oscuro, no quiere decir de que no sea luminosa de principio a fin", aseguró.

Antes de estrenarse en los cines, la película de Cuarón ha recorrido varios festivales y, en opinión del cineasta, "si la siguen invitando es que tiene algo para festivales", aunque al mismo tiempo cree que sí tiene la capacidad de llenar las salas.

"La gente de festivales me dice que he hecho una película comercial y los exhibidores que he hecho una película de festivales. Yo como lo traduzco es que hice una película bien hecha que tiene potencial comercial", opinó.

Cuarón se enfrenta así con confianza a las salas de cine, después de que su primer largometraje en solitario "Rudo y Cursi" (2008) lograra tener un gran éxito entre el público.

"Ojalá el publico se vuelque de manera tan generosa en las salas de cine como se volcó con 'Rudo y Cursi' porque esta es una película tan divertida como la otra, nada más que los temas son distintos", aseguró.

El cineasta ha dejado así a sus dos talismanes, los actores Diego Luna y Gael García Bernal, protagonistas de su anterior filme, y ha pasado a dirigir a dos niños desconocidos, Daniela Arce y César Kancino, dos "diamantes en bruto".

"Es un placer distinto al de dirigir a mis amigos porque mis amigos son dos actores consagrados con dos maneras de actuar muy distintas", mientras que los niños "se pueden moldear como la plastilina"

Así, esto es "todavía mejor que lo otro" porque los puedes adaptar "a lo que estás buscando", contó sobre los protagonistas del filme, a los que encontró tras organizar un curso de actuación para niños.

Sobre la coincidencia en el estreno en México de su película con "Gravity" de su hermano Alfonso, estrenada el pasado viernes, el cineasta dijo que fue "por accidente".

Aunque en sus respectivos últimos trabajos han estado separados, Carlos Cuarón contó que los hermanos nunca dejan de colaborar creativamente y que, por ejemplo, el primero en leer el guión de "Besos de azúcar" precisamente fue Alfonso.