Madrid.- El director de cine Carlos Saura ha inaugurado en la Filmoteca Española la cuarta edición del ciclo "O Dikhipen, gitanos en el cine" y ha sido homenajeado por su amplia trayectoria cinematográfica y por su aportación a la filmografía flamenca.
"Por el flamenco, lo que haga falta. Todo esfuerzo es poco", ha asegurado el director en entrevista con Efe justo antes de subir al escenario del cine Doré, sede de la Filmoteca.
El ciclo ha arrancado con la proyección de la película "Bodas de sangre" (1981), una película muy especial para la comunidad gitana, que ha querido agradecer a Saura el "esfuerzo que ha hecho por transmitir una visión diferente" de su pueblo.
El director del Instituto de Cultura Gitana, Diego Fernández Giménez, ha asegurado que, "para los gitanos, Carlos Saura es al cine lo que García Lorca a la poesía", y ha recalcado que el director es la persona que más "ha trabajado para explicar lo que es el flamenco desde el cine".
El director está acostumbrado a recibir premios pues, entre muchos otros galardones, es miembro honoris causa de cuatro universidades y le fue concedida la medalla de oro de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas de España en 1992.
No obstante, se ha mostrado muy orgulloso del homenaje que le han tributado el Instituto de Cultura Gitana y la Filmoteca Española, pues reconoce que el flamenco "nunca ha gustado demasiado en España" y agradece que sus películas hayan ayudado a exportar "nuestro arte al resto del mundo".
Saura ha bromeado con el hecho de que el auditorio estuviera considerablemente lleno, "teniendo en cuenta el partido de fútbol tan importante que se disputa hoy. Es un mérito para el flamenco", ha dicho.
Cuenta Saura que le sorprendió gratamente encontrar sus películas musicales en un top manta de Moscú, o que en Shangai, donde estuvo recientemente, la gente conociera el flamenco gracias a sus películas.
Y es que, tras más de cuarenta filmes a sus espaldas, muchas de ellas musicales, su labor para con el flamenco no ha terminado y está estudiando la opción de escenificar la fusión entre las culturas flamenca e india.
Saura asegura que para él no ha sido un esfuerzo representar el flamenco y darlo a conocer, sino que es él quien se sintió agasajado por la cultura gitana, aunque reconoce que cuando le ofrecieron el proyecto de "Bodas de sangre", tenía "miedo de reproducir una imagen de paredes blancas y gitanos con navajas".
El director también ha querido matizar que, a pesar de que la comunidad gitana ha hecho una gran aportación al flamenco, no ha sido la única, y hay muchos sectores que han ayudado a formarlo como tal.
Durante el ciclo se proyectarán también las películas de Saura "Carmen" (1983), "El amor brujo" (1986), "Sevillanas" (1992), "Flamenco" (1995), "Iberia" (2005) y "Flamenco, flamenco" (2010).
Además, en la sección documental también se podrán ver los filmes "Una casa para Bernarda Alba" (2011), "Morente. el barbero de Picasso" (2010) y "Bodas de gloria" (1996), todos ellos considerados un "ejemplo de cómo transmitir la cultura gitana a la sociedad".
Por Keren Valverde.
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