Cayetana Guillén rescata "El malentendido" de Camus, más "oportuno" que nunca

  • Hace 44 años, cuando España vivía los tiempos represivos del franquismo, Fernando Guillén y Gemma Cuervo ponían en escena "El malentendido", una catártica obra de Albert Camus que hoy rescata su hija Cayetana como homenaje a su padre y por seguir su consejo: "Revisa esta obra, porque es muy oportuna".

Madrid, 28 ene.- Hace 44 años, cuando España vivía los tiempos represivos del franquismo, Fernando Guillén y Gemma Cuervo ponían en escena "El malentendido", una catártica obra de Albert Camus que hoy rescata su hija Cayetana como homenaje a su padre y por seguir su consejo: "Revisa esta obra, porque es muy oportuna".

"Quiero rendir homenaje a toda una generación de actores, no sólo a mi padre, sino a todos los que estrenaron a Camús o a Sartre en plena dictadura, cuando estrenar este tipo de obras era arriesgado: quiero dedicárselo a toda una generación que nos está dejando huérfanos a todos", ha dicho hoy Cayetana Guillén Cuervo.

Y no sólo se refiere la actriz a la reciente desaparición de su padre, cuyo dolor y la rabia por su muerte ha incorporado a su Marta, la protagonista de "El malentendido" que en 1969 interpretara su madre y a la que dará vida en el Teatro Valle-Inclán hasta el próximo 3 de marzo, sino a los intelectuales españoles que lucharon entonces.

"Este país no hubiera avanzado igual sin los actores", abunda el director de la obra, Eduardo Vasco, que hoy compareció en rueda de prensa en la sede del Centro Dramático Nacional junto a la actriz y "alma máter" del proyecto, y el resto del elenco, para presentar el estreno de la obra y dar detalles sobre su montaje.

"El malentendido" cuenta en el reparto con Ernesto Arias en el papel de Jan (que interpretara Fernando Guillén en la versión de Adolfo Marsillac); Lara Grube, como su esposa, y una excepcional Julieta Serrano como la Madre, que interpreta por primera vez a Camus.

"Es un texto muy difícil, muy intelectual: parece sólo un thriller pero no. Tiene una riqueza de conceptos y de ideas que llevan a unas profundidades muy difíciles de abarcar. Hacer todo esto cristalino ha sido un trabajo duro y difícil", ha comentado Julieta Serrano, "feliz" de estar en el proyecto.

La veterana actriz, imprescindible para Pedro Almodóvar en títulos como "Entre tinieblas" o "Mujeres al borde de un ataque de nervios", se siente también homenajeada por Cayetana.

"Soy de esa generación", dice -acaba de cumplir 80 años- y añade que hoy se siente "muy cercana a aquellos años de lucha y esperanza que tanta falta hacen ahora", en los "agrios" momentos que vive el país, "claustrofóbicos" en opinión de Guillén Cuervo.

La actriz ha contado con orgullo cómo su padre, débil y enfermo, le "pasaba" el texto en su cama del hospital, poniendo sus escasas fuerzas en ayudarla: "No lo olvidaré nunca", ha dicho.

"Acabo de vivir una situación personal muy dura, preguntándome cómo Dios puede...siento la misma rabia que mi personaje y me cuestiono la presencia de Dios", se desnuda la actriz, que sitúa la incomunicación como primer foco de problemas y esencia de "El malentendido".

Vasco ha respetado casi al dedillo el texto del Nobel de Literatura, de cuyo nacimiento se cumple el próximo 7 de noviembre el centenario: "He tratado de no sobreponerme a Camus".

"El malentendido", incluida en el ciclo del absurdo, es una obra "poliédrica" estructurada en tres actos, a la manera de las clásicas.

Apoyada la escenografía de Carolina González con la música en directo de una viola de gamba y un acordeón y el vestuario de Lorenzo Caprile, la versión de Yolanda Pallín que mañana se estrena es más próxima a la original de Camus que la puesta en escena en los sesenta, explica Vasco.

"El malentendido" cuenta el regreso de Jan a la pensión que regentan su madre y su hermana, 20 años después de abandonarlas para hacer fortuna, con la idea de que ellas le reconocerán, pero esto no sucede y este malentendido será fatal para él porque estas mujeres sobreviven asesinando a sus huéspedes para robarles sus bienes.

Inspirada en un suceso real, la obra se estrenó en 1944 en París y veinte años más tarde llegó a España gracias al empeño de un grupo de jóvenes actores pertenecientes al mítico Teatro Español Universitario (TEU).

"Parece nuestra labor intentar que no se desmorone todo lo que esta generación -dice Cayetana mirando a Julieta Serrano- había conseguido (...) sobre todo en un momento en el que se cuestiona desde la Constitución hasta la propia democracia, 'nos toca' mantenerlo", apunta la actriz en contraposición al "cambiar el mundo" por el que lucharon actores como aquellos. Como sus padres.

Mostrar comentarios