Eduard Fernández: "La Zona es una metáfora de la crisis y la sociedad actual"

"La Zona es una alegoría de la crisis y la sociedad actual. Muestra la corrupción y la reorganización de la sociedad tras un desastre, cómo algunos individuos sacan beneficio de lo ocurrido", explica Eduard Fernández, que interpreta a Héctor, el policía protagonista que investiga un crimen perpetrado en la zona de exclusión del accidente.

Este personaje resolverá el misterio principal con la ayuda de Martín (Álvaro Cervantes), un joven oficial de policía que se convertirá en su protegido. "Héctor es un maestro para Martín. Los personajes son unos antihéroes que tienen una relación muy familiar", explica Cervantes. Los actores ya coincidieron en el drama histórico 1898. Los últimos de Filipinas, estrenado el pasado mes de noviembre.

Otro de los personajes clave en la trama es Zoe, interpretada por Alba Galocha, una joven superviviente del accidente que vive en la zona excluida y tenía una relación con la víctima del crimen inicial. "Las tragedias hacen que Zoe se replantee su visión del mundo", afirma la actriz gallega, que ha asegurado que La Zona es una producción que "hará pensar a los espectadores".

UNA PRODUCCIÓN AMBICIOSA

Los hermanos Sánchez-Cabezudo no sólo han realizado el guión de la serie, sino que también son los productores y directores de la ficción de Movistar +. "Es un trabajo de autor, un proyecto muy personal que sale a la luz después de mucho tiempo. La Zona no está tan pendiente de la audiencia", sentencia Fernández.

A diferencia de otras ficciones televisivas, los ochos capítulos de La Zona se han grabado a la vez. "Solemos decir que en realidad es una película", afirma Fernández. El rodaje de la serie, que termina a comienzos de julio en Madrid después de cuatro meses, ha tenido lugar en los pozos mineros de Asturias, en Gijón, donde se ubica la ciudad reconstruida de la trama, y en el parque natural de Cabárceno.

"Las 160 localizaciones han aportado mucho al guión, la serie también tiene algo de road movie", confiesa Cabezuelo. Aunque la tanda de capítulos tiene un final cerrado, tal como aseguran sus guionistas, hay posibilidades de una segunda temporada.