Antonio Banderas se mete en la piel del descubridor de Altamira

  • Antonio Banderas se ha metido ya en la piel de Marcelino Sáenz de Sautuola, el descubridor de la cueva de Altamira, que interpreta en su nueva película, cuyo rodaje protagoniza hoy en Santander y que le ha llevado a lugares emblemáticos de Cantabria, como Santillana del Mar.

Francisco Bustamante

Santander, 20 nov.- Antonio Banderas se ha metido ya en la piel de Marcelino Sáenz de Sautuola, el descubridor de la cueva de Altamira, que interpreta en su nueva película, cuyo rodaje protagoniza hoy en Santander y que le ha llevado a lugares emblemáticos de Cantabria, como Santillana del Mar.

Con pelo y barba oscura, levita, pantalones y pajarita negros y camisa blanca, Banderas se ha paseado esta mañana por las inmediaciones de la casa-museo de Marcelino Menéndez Pelayo, otro cántabro universal, en cuyo interior se están rodando algunas escenas del largometraje "Altamira", que dirige Hugh Hudson.

La espectación esta mañana entre los santanderinos era máxima y las medidas de seguridad también, para evitar que se pudiera hacer fotos o grabar al actor malagueño caracterizado como el bisabuelo del recientemente fallecido presidente del Banco Santander, Emilio Botín Sáenz de Sautuola.

Sin embargo, y a pesar de que algunas calles aledañas a la biblioteca Menéndez Pelayo y a la casa-museo del intelectual santanderino estaban acotadas y vigiladas por la Policía, los fotógrafos de prensa y algunos curiosos han podido inmortalizar a Antonio Banderas convertido en Marcelino Sáenz de Sautuola.

Caracterizado como el mecenas que descubrió en el verano de 1879, junto a su hija de ocho años, las pinturas rupestres de Altamira en una cueva cercana a la localidad medieval cántabra de Santillana del Mar, el actor ha intentado que su imagen no sea retratada y tampoco ha querido atender a los periodistas.

Los medios de comunicación a penas si le han podido ver unos instantes esta mañana, en un momento en el que ha abandonado el rodaje de forma precipitada y con un 'sandwich' de chorizo en la mano para dirigirse a una de las autocaravanas instaladas, junto a otros vehículos con material y vestuario, en las inmediaciones del lugar de grabación.

Sus únicas palabras a los periodistas han sido para reconocer que está "muy contento" de estar en Santander y para asegurar que el rodaje va bien.

Después, los asistentes del rodaje han avisado a la Policía Nacional para que desalojara a los representantes de los medios de comunicación (periodistas, fotógrafos y cámaras de televisión) de la zona acotada para los vehículos de esta producción.

Mientras tanto, otros actores de la película, caracterizados como sus personajes, se paseaban por esa misma zona y atendían a la prensa, hasta que ha vuelto la calma, tras algunos momentos de tensión entre periodistas y personal de rodaje.

A continuación, Banderas ha salido de su caravana para seguir rodando, aunque lo ha hecho bajo un paraguas, a pesar de la soleada y espléndida mañana en Santander.

Los curiosos que se han ido acercando, mientras tanto, hasta esta zona céntrica de Santander, casi no han podido ver al actor malagueño y, con los teléfonos móviles en la mano, se preguntaban unos a otros si habían conseguido una fotografía, algo que solo han logrado unos pocos privilegiados.

El rodaje en la que fue casa de Marcelino Menéndez Pelayo recrea la conferencia que Sáenz de Sautuola impartió en ese domicilio en 1880 -un año después del descubrimiento de la cueva-, para defender ante eruditos de todo el mundo el hallazgo de las pinturas que hoy son Patrimonio de la Humanidad.

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