Sexo, drogas y escándalo en el Hollywood clásico

  • El libro “El grupo salvaje de Hollywood (Dioses y monstruos)” descubre los vicios de las estrellas de la edad dorada del cine norteamericano.
Julio Vallejo / Aviondepapel.tv

Las periodistas Karmele Marchante o Lydia Lozano no fueron las primeras ni serán las últimas en hablar de los secretos de los famosos. Muchos años antes, en EE UU, Louella Parsons y Hedda Hopper se encargaban de ensalzar o derrumbar carreras artísticas con sus simples cotilleos en columnas sindicadas.

Por su parte, “Confidential”, la gacetilla sobre el mundo del espectáculo y los famosos, ofrecía toda la actualidad del mundo íntimo de las estrellas del celuloide en los tiempos del sistema de estudios. Unos dioses cinematográficos que, como el común de los mortales, también tenían sus defectos y adicciones.

Kenneth Anger, cineasta underground, se encargó de recoger los sucesos más controvertidos de aquellos fulgurantes mitos de la edad dorada del cine norteamericano en sus entregas de “Hollywood Babilonia”, ejemplos prototípicos de periodismo amarillo.

Ahora, con un estilo mucho menos sensacionalista, el periodista cinematográfico Juan Tejero se encarga de reunir aquellas historias sobre los artistas de la Meca del Cine en “El grupo salvaje de Hollywood (Dioses y monstruos)”, un libro que recopila algunos de los escándalos y vicios de los astros del séptimo arte. En este artículo os ofrecemos un pequeño resumen de lo que podréis encontrar en este sabroso volumen.

Elizabeth Taylor

Ella fue ante todo una estrella. Cobró un millón de dólares por “Cleopatra” y acumuló maridos y affairs a diestro y siniestro. No obstante, su vida estuvo marcada por su relación con Richard Burton, un actor con el que protagonizó películas, peleas y reconciliaciones. Además de los hombres, la adicción a las drogas y el alcohol convirtieron su vida en materia prima para la prensa rosa.

Steve McQueen

El protagonista de “La gran evasión” y “Bullit” era un hombre difícil de domar. Conflictivo en la mayoría de los rodajes, el actor era amante de las emociones fuertes. Los vehículos a motor, las mujeres y el consumo de drogas como la marihuana, el ácido, la cocaína o el peyote fueron sus vicios antes y durante de su carrera en Hollywood. Una trayectoria que se vio cercenada por un cáncer que le llevó a la tumba a principios de los ochenta.

Marlene Dietrich

La andrógina imagen que la estrella cultivó en algunas de sus películas no era una simple pose. Además de sus apasionadas relaciones con el director Josef Von Sternberg, su gran valedor en Hollywood, o el actor Jean Gabin, entre otros muchos, Marlene Dietrich nunca disimuló sus tendencias sáficas.

Algunos han dado por seguro su romance con Greta Garbo y la lengua viperina de Kenneth Anger aseguraba que la protagonista se rodeaba habitualmente del denominado “círculo de costura de Marlene”, un peculiar grupo compuesto por inteligentes y sofisticadas bisexuales.

Errol Flynn

“El público siempre ha esperado que me comporte como un playboy, y un hombre decente no defrauda a su público”. Las palabras del protagonista de “Murieron con las botas puestas” definen muy bien el gusto del protagonista por el sexo. Entre sus amores femeninos cabe destacar los nombres de Joan Bennett, Beverly Adland, Lili Damita o la princesa rumana Irene Giska.

No obstante, también parece que compartió algo más que amistad con Tyrone Power o el escritor Truman Capote. Por si fuera poco, el actor fue amigo de la botella, consumidor de drogas e incluso estuvo involucrado en un proceso de violación, entre otros asuntos más o menos escandalosos.

Robert Mitchum

El inolvidable protagonista de “La noche del cazador” no se caracterizó precisamente por una existencia casta y pura. Su estilo de vida nada convencional le llevó a la cárcel por posesión de marihuana. Por si fuera poco, multitud de mujeres pasaron por su vida, aunque nunca se divorció de Dorothy, su primera y única esposa. Completando el círculo de vicios varios, el intérprete también se granjeó una fama de bebedor contumaz.

Los Barrymore

Mítica saga de actores procedentes de Broadway, los Barrymore han sido tanto o más famosos por sus logros profesionales como por su adicción al alcohol y los escándalos. Desde el mítico John Barrymore hasta su nieta Drew, la protagonista de “E.T.” y “Los ángeles de Charlie”, los miembros de esta familia de artistas parecen sufrir una extraña querencia por los excesos.

Tallulah Bankhead

Las palabras de la protagonista de “Náufragos” sirven para explicar perfectamente las razones que convirtieron su vida en motivo de escándalo: “Mi padre me advirtió sobre los hombres y el alcohol, aunque no sobre las mujeres y la cocaína”. Efectivamente, su bisexualidad y su adicción a las drogas fueron una verdadera provocación para la pacata sociedad norteamericana de los cuarenta y cincuenta del pasado siglo XX.

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