Correa denuncia la dominación cultural en apertura de Feria de Libro en Chile

Santiago de Chile, 25 oct.- El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, arremetió hoy contra la "dominación cultural" y la "colonización del pensamiento" al inaugurar junto a su homólogo chileno, Sebastián Piñera, la Feria del Libro de Santiago, que este año tiene a Ecuador como país invitado de honor.

En el primer día de su visita oficial a Chile, Correa se reunió con Piñera en el Palacio de la Moneda, sede del Ejecutivo, y posteriormente ambos mandatarios se desplazaron al Centro Cultural Estación Mapocho, sede de la feria, que este año cumple su 32 edición.

Ecuador desembarcará en este certamen, que se celebrará hasta el 11 de noviembre, con la presencia de medio centenar de escritores, un millar de títulos y un legado de autores como Pedro Gil, Ramiro Arias, Abdón Ubidia, Iván Egüez, Edgar Allan García y Jorge Enrique Adoum.

"Siempre hemos tenido excelentes creadores en el Ecuador. Siempre hemos tenido literatura del más alto nivel, pero se hizo nada o muy poco para promocionar a nuestros creadores en todas partes. Los escritores, poetas, se mantuvieron por desgracia casi inéditos, olvidados, silenciados", declaró Correa durante la inauguración.

"Ese sí que ha sido un verdadero atentado en contra de la libertad de expresión", añadió el mandatario, en una aparente alusión a quienes le critican por restringir la libertad de prensa en su país.

En un discurso cargado de contenido político, Correa denunció que, a su juicio, "la dominación cultural ha sido uno de los instrumentos más poderosos de sometimiento y subordinación, ha sido la voz presente y silenciosa del imperialismo."

Por eso, dijo entre constantes aplausos, la "verdadera independencia pasa necesariamente por la descolonización del pensamiento y por recuperar la capacidad creadora" de los pueblos latinoamericanos.

Correa definió el neoliberalismo como una "imposición de esa ideología disfrazada de ciencia" y el Consenso de Washington como una "muestra de etnocentrismo", todo ello ante las ovaciones del público y la mirada de Piñera, férreo defensor del libre mercado.

El gobernante ecuatoriano habló también de la primera vez en el mundo que llegó al poder por las urnas una propuesta "revolucionaria socialista", liderada por Salvador Allende, y del "golpe militar y artero" del 11 de septiembre de 1973.

Llegado su turno, Piñera, que se opuso a la dictadura en Chile pero cuya coalición integra a algunos de quienes la respaldaron, advirtió de que "los países sin memoria son países sin historia, y los países sin cultura son países sin alma".

"Todos aquellos que han querido separar la libertad de la cultura" han terminado matando una de ellas, recalcó.

Pero más allá de estas apreciaciones, el mandatario chileno, con un tono bromista, optó por competir con Correa solo en un punto, en el de la diversidad de paisajes que ofrece cada país, después de que el ecuatoriano hiciera una larga enumeración de las bellezas que existen en "la mitad del mundo".

Tras cortar la cinta inaugural, ambos se dirigieron al Palacio de la Moneda, donde Piñera ofreció una cena en honor a Correa.

Antes de llegar a Santiago, el presidente ecuatoriano realizó una parada en la ciudad norteña de Calama para visitar la mina Gaby, propiedad de la estatal Codelco, y conocer la tecnología que se emplea en sus operaciones.

Correa reanudará este viernes su agenda con un encuentro con empresarios chilenos, una conferencia magistral en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y una visita a la tumba del gobernante socialista Salvador Allende.

Ya por la tarde, regresará a la Feria del Libro para presentar su libro "Ecuador: de Banana Republic a la No República", publicado en 2009, y con ello dará por finalizada su visita a Chile.