Cubano Tony Ávila propone música como vehículo de integración latinoamericana

Quito, 24 ago.- El cantautor cubano Tony Ávila propuso hoy en Quito convertir a la música, que se crea actualmente en América Latina, en otro vehículo para afianzar la integración que persiguen los Gobiernos y pueblos de la región.

"La música ha sido una de las vías, por excelencia, para integrar, para levantar el autoestima de los pueblos y para defender las causas de los hombres", aseguró a Efe Ávila, quien ofrecerá el próximo viernes un concierto en la capital ecuatoriana.

El cubano aseguró que "en América Latina hay un movimiento importante de trovadores" que puede convertirse en un nuevo foco de identidad regional.

Recordó que algo así sucedió en las décadas de los años setenta y ochenta, cuando el canto popular latinoamericano marcó época y en la que fulguraron, entre otros, Pablo Milanés y Silvio Rodríguez, máximos representantes de la "nueva trova cubana".

"América Latina no está tan distante (como en aquella época), aunque tampoco tan cercana como la quisiéramos ver, pero tiende a unirse, a reunirse en las circunstancias actuales", señaló Ávila, para el que Milanés y Rodríguez surgieron en "un momento histórico determinado", con "circunstancias especiales" que lo permitieron.

Por eso Ávila dijo creer que su música es un resultado del devenir artístico en la Isla y en Latinoamérica. Por ello, el movimiento artístico que representa ha sido bautizado por la crítica y la prensa como "la novísima trova cubana".

El calificativo no le convence del todo al cantautor cubano, quien prefiere pensar que lo actual es fruto de la fusión de ritmos propios de la Isla -como el guaguancó, el son y el changüí-, y los nuevos, pasando por el rock y el pop, entre muchos otros.

Fusión que también proviene de los inicios de la "trova cubana", surgida a finales del siglo XIX y que ha contado con figuras como Pepe Sánchez, Alberto Villalón y Sindo Garay, recordó Ávila.

Por eso, el movimiento de la "novísima trova cubana" conserva la fuerza de las letras que hicieran "gigantes" a Milanés y Rodríguez, añadió Ávila, un trovador de 41 años de edad que empezó como percusionista a los once, en un grupo de música latinoamericana de su Isla.

"Una canción a lo mejor no cambia el mundo, pero lo mejora", apostilló el músico, que en septiembre próximo emprenderá uno de sus mayores desafíos, pues irá a Japón en una gira de tres meses.

Ávila señaló que no es posible conjugar una realidad como la que rondó a la "nueva trova cubana", pero dijo que para él sí es posible que vuelvan a juntarse los "buenísimos" músicos que hay ahora en América Latina.

Para él, los "encuentros de artistas son un ejemplo de esa unidad entre los latinoamericanos".

Su llegada a Quito obedece a una invitación de la Corporación de artistas Kiart para que participe en actos organizados en torno al Año Internacional de Afrodescendientes.

Este viernes el cubano Ávila ofrecerá un concierto en el Instituto Ecuatoriano de Cultura Hispánica, en Quito, y el próximo 30 de agosto lo hará en la ciudad de Riobamba, en el centro de los Andes del país.

En esas y otras presentaciones, Ávila presentará melodías de su primer álbum, "... en Tierra", donde destacan canciones como "Científicamente negro", "Amor de cromagnon" y "Al sur de tu garganta", entre otras.