Tras realizar una visita por sus instalaciones en Cazalla de la Sierra (Sevilla), el consejero ha subrayado su actividad empresarial, centrada en el diseño de nuevos estilos y productos. "Ha desarrollado una línea de fabricación a medida, así como una línea de listo para usar, de alta calidad, con un diseño único", ha apostillado.
"Su mercado principal es el exterior. La internacionalización de sus productos representa la columna vertebral de su negocio", ha remarcado Sánchez Maldonado, quien ha añadido que sus prendas se comercializan a través de Internet, intermediarios, contando además con tiendas propias en Nueva York, Tokio y Berlín.
Desde su taller de Cazalla, su único centro de producción en todo el mundo, Yumiko ha dado repuesta a un nicho de mercado que requiere de exclusividad y de excelente calidad. "Supo aprovechar las carencias detectadas en ese mercado y está brindando décadas de tradición textil en este municipio sevillano de la Sierra Norte", ha puntualizado.
El consejero también ha valorado la evolución de la industria textil y de confección en la Comunidad, que, al igual que el resto de sectores económicos, "ha sufrido los efectos de la crisis, pero comienza a dar señales de mejoría. El titular de Empleo ha añadió que desde 2014 las cifras han experimentado "un moderado crecimiento", y, según los últimos datos disponibles (2016), la Comunidad cuenta con cerca de 1.800 empresas de esta actividad, que suponen el doce por ciento del total nacional.
Por lo que respecta al empleo, la región ocupa en esta actividad a casi 11.000 personas, lo que representa el 7,3 por ciento del total nacional.
LA EMPRESA
Yumiko es una empresa que nació en 2002 y que ya suma más de 15 años en el mercado. Está constituida por Mark Andrew y Yumiko Takeshima. Yumiko es una bailarina que ante la dificultad de encontrar ropa cómoda y a su gusto para ejercer su trabajo optó a mediados de los 90 por diseñar sus propios patrones y elaborar sus propios maillots. La idea de montar un taller de confección de ropa para danza surgió de Mark Andrew (su esposo), cuya madre era de Cazalla. Les encantó el municipio y su entorno y, por ello, decidieron montar su taller en esta localidad.
Entre sus clientes destacan las grandes compañías de ballet de Londres, Milán, París o Nueva York. Sus diseños han llegado a la gran pantalla y forman parte del vestuario de cantantes internacionales (Madonna).
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