El argentino Cohan cuestiona la impunidad y desnuda la culpa en "Sin retorno"

  • Madrid.- El cineasta argentino Miguel Cohan presenta el próximo viernes, día 18 de febrero "Sin retorno", su primer largometraje, donde cuestiona la justicia, la impunidad, la manipulación y la culpa en un drama "seco" y desnudo que apuntala de manera excepcional el actor Leonardo Sbaraglia.

El argentino Cohan cuestiona la impunidad y desnuda la culpa en "Sin retorno"
El argentino Cohan cuestiona la impunidad y desnuda la culpa en "Sin retorno"

Madrid.- El cineasta argentino Miguel Cohan presenta el próximo viernes, día 18 de febrero "Sin retorno", su primer largometraje, donde cuestiona la justicia, la impunidad, la manipulación y la culpa en un drama "seco" y desnudo que apuntala de manera excepcional el actor Leonardo Sbaraglia.

Y esto ha sido así, ha explicado a EFE el director bonaerense, de visita promocional en Madrid, porque quería huir "por todos los medios del melodrama. Y es seca, pero no fría", puntualiza.

La película, con guión del propio director y de su hermana Ana -que es filósofa y periodista, dice Cohen-, cuenta la historia de Federico (Sbaraglia), un hombre joven de clase media, que se ve acusado de un atropello mortal que no ha cometido, presionada la justicia por la repercusión mediática del caso.

El espectador sabe en todo momento quién es el culpable y cómo la decisión de ocultar el crimen va golpeando como una ficha de dominó en las personas de su alrededor.

"Intenta hablar sobre la justicia, de la manera de hacer justicia; para qué sirve, qué es, si nos alcanza la justicia institucional y nos da respuestas", responde Sbaraglia como una ametralladora: "sutilmente -dice en una entrevista con EFE- lo que hay es una crítica a la corrupción y negligencia de la justicia institucional".

Por no hablar de la manipulación, o -puntualiza el actor argentino- del poder de los medios de comunicación: "la que se imparte por sus propios intereses".

Y toda esta reflexión que brota de Sbaraglia, se convierte en un gesto de triunfo con su puño cuando se entera de que esta misma mañana, Silvio Berlusconi ha sido imputado y tendrá que dar cuentas a la justicia por el caso Ruby (prostitución de menores y abuso de poder).

"Berlusconi -reflexiona Sbaraglia- es un tipo que está formado con tal nivel de inhumanidad que la reproduce no solo en sus relaciones íntimas sino en todo un país. Desgraciadamente, añade, hay millones de personas que son así, y no son castigadas, pero afortunadamente hay la alternativa de elegir", dice, y ese es el punto en el que hilvana el asunto con la película.

Federico Luppi, que encarna al padre que reclama por televisión justicia para la muerte de su hijo, y una convincente "argentina" Bárbara Goenaga, que interpreta a la esposa de Federico, además del joven Martín Slipak en el papel del homicida, forman parte de un reparto que el director reconoce que "fue una suerte" tener.

La película consiguió el máximo galardón a su paso por el último Festival de Cine de Valladolid y se llevó, además, el Premio Pilar Miró al mejor nuevo director y del de la crítica internacional (FIPRESCI).

No es extraño el manejo de cámara de Cohan tras años de asistir al sólido realizador argentino Marcelo Piñeyro ("era más que un ayudante, sus opiniones contaban", apunta Sbaraglia) en películas como "El método", "Kamchatka", "Plata quemada" o "Cenizas del paraíso", las dos últimas con el actor argentino.

"Es un tipo muy preparado, muy inteligente, que trabaja muy bien a los actores, y cuenta con un extraordinario guión", explica Sbaraglia.

Producida por las productoras argentina Haddock Films y las españolas Tornasol y Castafiore, responsables de la oscarizada "El secreto de sus ojos", cada uno de los personajes de "Sin retorno" tiene un reflejo en algún comportamiento humano de todos los días.

"Yo no creo en la impunidad -declara Cohan-. Existe, socialmente o a nivel de la justicia, pero creo que las personas son responsables de sus actos, y aunque la sociedad no nos lo demande, uno lo lleva encima, en su cuerpo, hasta físicamente".

"Es una historia humana, de gente que tiene que aprender a encontrar la justicia frente a actos que no tienen vuelta atrás", resume Sbaraglia, que luce un look "rapado" por su nuevo papel: rueda con Rodrigo Cortés (con quien ya trabajara en "Concursante") su primera película en inglés, "Red ligths", donde se codea con Robert De Niro y Sigourney Weaver.

Alicia G.Arribas.

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