El arte de la guerra, aunque pese a muchos, vende

  • Las ideas preconcebidas hacen que tanto estadounidenses como europeos piensen que Oriente Medio es sinónimo de conflicto
Una pieza sin título del artista Baalbaki | Ben Gilbert, Global Post
Una pieza sin título del artista Baalbaki | Ben Gilbert, Global Post
Ben Gilbert | GlobalPost para lainformacion.com
Ben Gilbert | GlobalPost para lainformacion.com

El arquitecto libanés Bernard Khoury, uno de los más famosos del mundo árabe, ha dicho que ya basta, al menos de lo que él califica como visiones negativas y simplistas de Oriente Medio, especialmente aquellas perpetuadas por el mundo del arte. Según Khoury, los propietarios de galerías, comisarios y coleccionistas de arte de EEUU y Europa han alimentado las percepciones de occidente que han encajonado a los artistas árabes como autores de un "arte de guerra".

"Creo que los artistas libaneses y árabes sólo son celebrados por su esteticismo de la guerra, por hacer de ella un fetiche… lo que yo llamo una fantasía neocolonialista de lo que es el Líbano y el mundo árabe", dice Khoury en su amplio estudio cerca del puerto de Beirut. Las críticas de Khoury se expresan en un collage- escultura titulada POW (prisionero de guerra) que se exhibe en una galería de Beirut.


Prisioneros del arte de la guerra

En su opinión, hay que sensibilizar y generar debate entre los artistas libaneses y árabes sobre el "nicho de guerra" del que se han convertido "prisioneros". "Da miedo ver cómo todos los artistas contemporáneos son colocados dentro de ese nicho, incluso los que tienen mucho más que decir en sus obras", se lamenta. Khoury asegura que se ha ido dando cuenta de esto en los 11 años transcurridos desde que ganó fama internacional por sus propios proyectos basados en la guerra, y que han sido etiquetados como "arquitectura de combate". Según Khoury, el tema de la guerra se ha convertido en algo comercial y en un cliché.

"Creo que los artistas tienen una responsabilidad, y poco a poco me voy dando cuenta de que nos estamos convirtiendo en actores realmente pasivos en un escenario en el que no tenemos mucho que ver", dice. "Tan solo cabalgamos sobre la ola, porque hay demanda [de arte de guerra]. Creo que hay otra modernidad y otros temas en esta parte del mundo. Esto ha sido sobreexplotado".

El arte de Oriente Medio basado en el conflicto ha tenido amplio éxito entre coleccionistas y comisarios de exhibiciones en los últimos años, especialmente después de los ataques del 11 S en EEUU y las invasiones de Irak y Afganistán, según afirman comisarios y gerentes de galerías libanesas.

Escenas de guerra que venden en el extranjero

"Todo el mundo está emocionado últimamente con el arte iraní, árabe y de Oriente Medio", afirma la directora de la galería Espace Kettaneh-Kunigk en Beirut, Joy Mardini, que anteriormente trabajó en la sala de subastas Christie's. "Me alegra por nosotros, por Oriente Medio. Finalmente alguien está escuchando y viendo nuestro trabajo. Pero es triste que las escenas de guerra se vendan tan bien en el extranjero".

Este verano numerosas galerías e instituciones de arte libanesas celebraron exhibiciones basadas en el tema de la guerra. Muchos artistas, sin embargo, rechazan la acusación de Khoury de ser "prisioneros".

"Los otros trabajos que hago son mucho más exitosos que los que hago sobre la guerra", dice Akram Zaatari, un fotógrafo libanés cuyas obras se exhiben en la Tate Modern de Londres y en el Centro Pompidou de Paris. "Los coleccionistas me han dicho que están hartos de la guerra, y me dicen que les gustaría reunir imágenes de flores y de no violencia".

La guerra civil del Líbano es el tema sobre el que giró este verano el proyecto "El camino hacia la paz" en el Beirut Art Center, con un mes de conferencias y una exhibición de arte creado durante el conflicto. La directora del centro, Sandra Dagher, asegura que la guerra es un tema tan común en el arte libanés porque el país y sus artistas todavía conviven con esa realidad.

"Es normal que los artistas trabajen en el contexto en el que viven", dice Dagher. "Y todos nosotros aún sufrimos los traumas de la guerra. Acabó hace 15 años oficialmente, pero todavía vivimos la tensión. Y cada vez que hay un nuevo enfrentamiento político la gente rememora lo que ocurrió. Creo que la gente no habla lo suficiente sobre la guerra".

Ideas preconcebidas de Oriente Medio

Dagher cree que los comisarios occidentales son culpables por escoger de los portafolios de los artistas libaneses y árabes trabajos que han creado una especie de neo orientalismo que encaja con ciertas percepciones erróneas de Occidente, proyecciones y nociones preconcebidas de Oriente Medio.

Joy Mardini, del Espace Kettaneh-Kunigk, considera desafortunado que el interés de Occidente en el arte libanés y árabe gire en torno a la comercialización de la violencia y de la guerra. Pero, dice, "la guerra es sexy" y vende, aunque sea por el momento.

"Creo que en unos cinco años, o unos 10, llegaremos al punto que la gente estará harta del tema y los artistas lo notarán, y entonces cambiarán", augura. "Es una ola, como el art deco o el art nouveau".

Pero el fotógrafo Akram Zaatari espera que el arte basado en la guerra no sea simplemente una fase. Teme que las críticas hacia ese tipo de trabajo alejen a los artistas de explorar ese tema.

"Tengo miedo de que se marginalice a la gente, porque el trabajo serio sobre la guerra civil ni siquiera ha empezado", afirma. "Me preocupan los que me dicen que ya están hartos del tema, porque es un terreno que ni siquiera se ha abierto todavía. Lo que habéis escuchado hasta ahora es realmente nada. Personalmente, yo no he abierto aún mis archivos de la guerra civil libanesa porque no sé por dónde empezar".

Mostrar comentarios