El autor Fernando Méndez presenta su homenaje escrito a la inocencia infantil

Lorena Rodríguez

Ourense, 27 oct.- "No cabe más ternura ni emoción" y una novela "que rinde homenaje a los seres 'mudos e invisibles' de la humanidad: los niños!" son sólo algunos de los calificativos que ha recibido el trabajo "Nunca guardes las cosas rotas", un homenaje a la inocencia infantil escrito por el comunicador ourensano Fernando Méndez y ganador del sexto Certamen de Novela "Ciudad de Almería".

El Liceo de Ourense ha sido hoy la primera parada de la amplia gira de presentación de esta narración basada en una foto, un país en guerra y un amor oculto, tres cosas rotas que un niño de diez años intenta unir para encontrar respuestas, pero con el problema de que el "mundo de los mayores" no está hecho para los más pequeños.

Con esta publicación, que trae a la cabeza otros éxitos como "El niño con el pijama de rayas", Méndez, que nació en Buenos Aires aunque sus raíces están en Celanova (Ourense), pretende "rendir homenaje a los seres más indefensos y más olvidados de la humanidad, que son los niños".

El relato conmueve y el título partió de una frase de su propia hija, Adriana, desvela el artífice de este ejemplar en una entrevista con Efe.

"Nunca guardes las cosas rotas" muestra el periplo de Sebas, hijo de una maestra que es amiga del general más importante de la Guerra Civil española.

Este es el punto de partida de un trabajo literario en el que se "cuenta la Guerra Civil desde los ojos de un niño", con "todo lo que acontece, sin ningún tipo de tinte político, ni de buenos ni de malos, dado que al final en la guerra perdemos todos y fundamentalmente los niños", concluye Fernando Méndez.

A medida que avanza la historia, el crío protagonista se plantea algunas cuestiones como "¿por qué los 'rojos' no van vestidos de rojo?" o "si la guerra es una enfermedad contagiosa".

La novela, ambientada en el rural gallego y también en zonas de Madrid, Castilla-León y el País Vasco, muestra ese proceso evolutivo que se da desde una primera etapa marcada por la inocencia infantil hasta otra en la que el muchacho "se ve enfrentándose a la más cruda realidad" y empieza a preguntarse qué es lo que de verdad sucede a su alrededor.

Para su escritura, Fernando Méndez ha tenido que documentarse sobre diferentes aspectos del conflicto bélico, "uno de ellos, el tema de los orfanatos y de la Guerra Civil", e igualmente ha trabajado el aspecto ambiental.

"No solamente me he ilustrado sobre el tema bélico en sí -concreta- sino que he investigado cómo vivía la ciudadanía en aquel momento", una cuestión que ha considerado vital a la hora de dotar a la obra de "cierta verosimilitud".

Según el periodista gallego, a pesar de la gran documentación que existe desde los diferentes ámbitos, -histórico, sociológico, documental...-, "se ha dejado de lado el gran problema que es el tema de los niños" porque "nadie se ha preocupado por saber cómo han visto los niños esa guerra".

Desde una visión infantil, el hilo conductor de la historia que él firma es "una foto rota que Sebas se encuentra un día en donde están su madre y él y también un soldado con muchas medallas que no sabe quién es, porque no sabe quién es su padre ni dónde se encuentra su padre".

Todo ha sido un atractivo y laborioso trabajo, resume Fernando Méndez, que le resultó "complicado" por "el hecho de tener que traspasarme de la vida de adulto a la vida de niño".

Autor de una obra ganadora del VI Certamen de Novela "Ciudad de Almería", el escritor confiesa que lo que más ilusión le hace es que "se premie algo relacionado con los niños, ya que los que somos niños o somos padres sabemos lo que es la inocencia infantil".

Ya por último, en lo tocante a sus próximos proyectos, este polifacético autor avanza que está trabajando actualmente "en otra novela de humor espiritual", senda que inició con 'Cuatro esquinitas tiene mi cama'.

La nueva entrega tendrá un poso de reflexión y, al igual que ocurría con su primera incursión en este género, dará importancia "a las cosas que verdaderamente importan en la vida". EFE

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