El CNDM encara una temporada a prueba de crisis con el público en el bolsillo

Concha Barrigós.

Madrid, 5 oct.- Doble de conciertos, tres veces más de público y siete más de ingresos que en 2009 avalan la singladura del Centro Nacional de Difusión Musical, (CNDM), que afronta desde mañana su tercera temporada con 102 propuestas para 14 ciudades y "lo mejor" que hay en el mercado de las músicas "infrecuentes".

El CNDM, que dirige desde su creación, en 2010, Antonio Moral, abre temporada con una propuesta también atípica: el recital de una "debutante absoluta", la mezzosoprano de 23 años Nerea Berraondo, seleccionada en el I Curso de Interpretación Vocal en el Barroco español que organizó el VI Ciclo de Músicas Históricas de León.

Y esa elección la explica que el propósito de Moral, según explica en una entrevista con Efe, es "demostrar que el apoyo a los jóvenes no es una entelequia sino una realidad" y que además esa entidad engloba al Centro de de las Artes Escénicas y de las Músicas Históricas de León (CAEMH).

"Estoy muy contento, muy ilusionado, porque es difícil poner en marcha un proyecto como este desde cero. A ello se suma la gran alegría de haber podido salvar, en coproducción con el Teatro de la Zarzuela, el ciclo de lied -que hasta ahora patrocinaba Caja Madrid-", detalla.

A Moral (Puebla de Almenara, Cuenca, 1956) le dieron en 2010 "una coctelera -el CAEMH, el Auditorio Nacional y el Centro para la Difusión de la Música Contemporánea (CDMC)- para mezclar música fuera de repertorio" cuyo resultado podía ser "o no" del agrado del público.

Salieron con ocho ciclos muy distintos entre sí, desde flamenco a jazz, pasando por música barroca a contemporánea y "transversal", es decir "muchas" líneas de trabajo y la misión de crear demanda para ello.

"Nuestra sorpresa ha sido la respuesta del público: una media del 79,8 % de ocupación, una subida del 26% en la venta de abonos -de 2.461 a 3.110-, varios conciertos ya agotados -Les Ars Florissants, el 13 de noviembre, e Il Giardino Armonico, 13 de febrero-... Me había dado de plazo tres años pero la propuesta ha calado en sólo un año", presume.

El CNDM da "cabida a lo que no cabe en otro sitio", "trabaja dentro de cada género lo menos conocido" y eso ha creado "el hábito" en el público, joven y menos joven, de acudir al Auditorio "a ver lo que hay": "vamos por el buen camino", sentencia.

Esta temporada, asume, será "difícil y complicada" económicamente pero está confiado en que saldrá adelante a juzgar por lo que ha sucedido en esta: a pesar de un descenso del 12 % en su presupuesto, ingresaron el doble que el anterior, 300.000 euros, "un éxito teniendo en cuenta que el 30% de los conciertos son gratuitos".

"La crisis es relativa -asegura el que fuera durante casi cinco años director artístico del Teatro Real-. Puede ser una disculpa o un acicate. Estamos preparados para aguantar un descenso pero el peor año será el próximo", augura.

Él ha elegido no ser catastrofista, poner buena cara al temporal, y dejarse "de alharacas que solo sirven para que el gestor de turno se ponga medallas" y gestionar un presupuesto que hace tres años era de 3,5 millones de euros, y 22 personas en plantilla, a uno de 2 millones, con 8 personas además de él en el centro.

Aún no sabe la reducción que les aplicará el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), del que son una unidad de producción, pero se ha preparado "para lo peor" con una planificación un 40 % más barata que el año anterior, reduciendo "sólo" en 15 el número de espectáculos, de los que 12 son encargo del CNDM.

La calidad, subraya, "no ha descendido ni un ápice". "Vienen los mejores que podemos pagar, de Cecilia Bartoli a Chick Corea, de Jordi Savall a Diego el Cigala. De 152 intérpretes, además, 70 son españoles y de las 504 obras que se tocarán, 256 son españolas", precisa.

Los ciclos "Bach Modern" o "Series 20/21" recogerán la música actual creada fuera y dentro de España, y otros como "Músicas Históricas" o "Universo Barroco" prestarán atención a artistas clásicos como Haendel y acontecimientos históricos como la Batalla de Navas de Tolosa servirán de excusa para recuperar un repertorio poco conocido.

Dentro del ciclo Universo Barroco,que plantea un diálogo entre España e italia, destaca la participación de Bartoli, que regresa al Auditorio Nacional tras veinte años ausente.

Su participación será posible gracias a la "nueva filosofía" que, según Moral, va a empezar a adoptar el CNDM con la contratación de grandes artistas: estos se llevarán "la caja" que hagan, es decir, el dinero que se ingrese con la venta de entradas de su actuación.

Los ciclos de Flamenco y Jazz volverán a ser dos de los más esperados, gracias en gran medida a la presencia de artistas como "El Cigala" en el primero o Tomatito en el segundo.