El español Antonio Ferrera "corta" dos orejas en la Feria de Maracaibo

Santiago Morales

Maracaibo (Venezuela) 19 nov.- El diestro español Antonio Ferrera paseó dos orejas simbólicas después de que fuera indultado su segundo toro en la tercera corrida celebrada hoy en la Monumental de la ciudad petrolera de Maracaibo, en el oeste de Venezuela, en el que fue el segundo indulto de la feria la Feria de la Chinita.

El rejoneador Francisco Javier Rodríguez y el diestro Cesar Vanegas, ambos venezolanos, cortaron dos orejas cada uno, mientras que el español Rafael Rubio "Rafaelillo" se fue de vacío.

Se lidiaron siete toros nacionales, seis de la divisa San José de Bolívar del español Gerónimo Pimentel, y el cuarto de Campo Grande, para rejones, bien presentados. Destacaron por su nobleza y bravura segundo y quinto de lidia ordinaria y el de rejones.

El toro indultado de nombre Apasionado, número 608 de 427 kilos. La plaza registró medio aforo.

"Rafaelillo", aplausos y aviso.

Ferrera, aviso y dos orejas simbólicas.

Vanegas, dos orejas y silencio.

Rodríguez, dos orejas.

Abrió la tarde "Rafaelillo" lanceando valiente al jabonero de Pimentel, que fue cambiado con dos pullazos que le hicieron chorrear sangre hasta la pezuña y un par de banderillas.

El maestro toreó con la diestra abriendo el compás hasta que el toro se vino abajo y lo liquidó de estocada y descabello.

A su segundo lo recibió con larga cambiada en tablas, se quedó sin picar y lo mató de estocada.

Ferrera se encontró con un primer toro que no colaboró. El diestro español invitó a banderillear a Vanegas pero los dos coletas pasaron sin pena ni gloria por la suerte. En el último tercio, espantó las moscas con la muleta antes de despachar al animal de dos espadazos.

Sin embargo, la cosa cambió y mucho con su segundo, al que recibió con valiente y vistosos lances. El toro recibió una buena vara y lo cambió para deslumbrar en la suerte de banderillas clavando los seis palos en todo lo alto en medio de atronadora ovación.

Faena de poder a un toro que embistió con raza y nobleza a la flámula del extremeño, haciendo lucir al toro en reposadas tandas de naturales y derechazos acompañado por la música que hicieron levantar a todo el público. El respetable pidió el perdón para la vida del animal y el palco concedió.

Ferrera fue ovacionado y paseó los simbólicos trofeos.

El venezolano Vanegas toreó valiente al tercer jabonero que recibió dos puyazos metiendo los riñones. En la suerte de banderillas, el diestro devolvió cortesía a Ferrera y este clavó su par con soltura, a lo que Vanegas respondió con un par de poder a poder.

Emotiva faena por los dos pitones al compás de la música a un toro que no se cansó de embestir con nobleza a la muleta del torero del patio, se perfiló distanciado para atacar derecho con la espada enterrándola hasta las cintas, y dándole al diestro dos orejas.

Lanceó valiente al que cerró plaza, aunque clavó un solo par de banderillas ante la venida a menos del toro, que mató con apuros.

Francisco Javier clavó rejoncillo de castigo a un toro "rajao". Mató de certero rejón desde el caballo que premiaron con dos merecidas orejas, que paseó en triunfal vuelta al ruedo.