El Hermitage de Amsterdam exhibe más de 1.000 porcelanas del Imperio Ruso

  • El museo Hermitage de Amsterdam celebra su quinto aniversario con la exposición "cena con los zares", que muestra más de mil piezas de porcelana que pertenecieron a los zares de Rusia entre el siglo XVIII y XX y que se estrena hoy.

Caralp Mariné

Bruselas, 6 sep.- El museo Hermitage de Amsterdam celebra su quinto aniversario con la exposición "cena con los zares", que muestra más de mil piezas de porcelana que pertenecieron a los zares de Rusia entre el siglo XVIII y XX y que se estrena hoy.

Este centro de arte invita al visitante a conocer de cerca cómo eran los banquetes a los que asistían los emperadores de la época, a través de un recorrido que muestra piezas únicas producidas por los principales fabricantes de porcelana del momento de Sèvres (Francia), Wedgwood (Reino Unido), o Meissen (Alemania).

El visitante podrá imaginar que ha sido invitado por los emperadores rusos para participar en una de estas ceremonias y explorar cómo era la decoración de las salas, qué tipo de trajes eran típicos o incluso descubrir de qué temas se hablaba durante los banquetes.

La porcelana apareció por primera vez en China en la época de la dinastía Shui (581-617), fue por esto que este material se convirtió en una de las principales exportaciones de ese país asiático en la época.

Europa no descubrió hasta el siglo XIV el secreto de su producción, cuando Prusia, Austria, Francia y Rusia empezaron a producir la porcelana que ha llegado hasta nuestros días.

Este material se convirtió en un símbolo de éxito para las naciones, una marca de estatus, y permanece ahora como un símbolo nacional cultural.

La colección de porcelana europea que se podrá contemplar en Amsterdam pertenece a una mayor del Hermitage de San Petersburgo que está compuesta por más de 15.000 piezas que fueron elaboradas entre 1745 y los años precedentes a la Primera Guerra Mundial.

Las piezas que se exhiben a partir de hoy y hasta el uno de marzo en Amsterdam recrean la atmósfera del día a día de la corte rusa, contando la historia de los banquetes y los bailes típicos de aquella época.

El visitante podrá ver cómo se organizaban las salas para los banquetes, cómo se preparaban las mesas y cómo la decoración de estas mesas fue cambiando a lo largo de los años que transcurrieron durante las dinastías de los zares.

La exposición cuenta la historia de los bailes extravagantes y los banquetes más espléndidos del reinado de Catalina la Grande (1762-1796), cuando centenares de platos eran servidos en un solo banquete y miles de invitados asistían a los bailes.

El último zar, Nicholas II (1894-1917) y su mujer Alexandra, quién organizaba la mayoría de los grandes bailes pero estaba presente lo menos posible, fueron los últimos, de esta época del Imperio Ruso, en capturar la imaginación de todas las cortes a través de estas piezas.

Las vajillas de porcelana iban acorde con las normas de protocolo de la época, acompañadas con centros de mesa, cristalería con montura de oro, candelabros, floreros y decoraciones en las paredes.

La exposición ofrece un amplio rango de piezas, no solo las vajillas, sino también la cubertería, cubiteras para las botellas de licor, copas de helado, figuras de mesa o los saleros.

También introduce al visitante a las costumbres culinarias típicas imperiales, unas cenas donde los banquetes se componían de 300 platos.

En el amplio menú el postre era lo más relevante de la comida y el plato ideal para mostrar a los invitados el gusto refinado y saludable que tenía la corte.

Entre los siglos XVIII y XIX los bailes y los espectáculos se convirtieron en eventos cotidianos para la clase alta en los que el chismorreo y los escándalos estaban también presentes, un detalle que también se muestra en la exhibición.

La vajilla que una vez utilizó Stalin, expuesta por primera vez al público, es la sorpresa final que cierra esta muestra.

Nunca antes Holanda había tenido una exposición que reuniera tantas piezas de porcelana juntas como lo hará a partir de hoy el Museo Hermitage de Amsterdam.

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