El Lliure comenzará la temporada con una coreografía Gelabert-Azzopardi

  • Barcelona.- El Lliure abrirá la programación de la temporada en el teatro de Montjuïc, el Fabià Puigserver, con una revisión de la coreografía "Belmonte", de la compañía Gelabert-Azzopardi, de 1988, interpretada por sus creadores.

El Lliure comenzará la temporada con una coreografía Gelabert-Azzopardi
El Lliure comenzará la temporada con una coreografía Gelabert-Azzopardi

Barcelona.- El Lliure abrirá la programación de la temporada en el teatro de Montjuïc, el Fabià Puigserver, con una revisión de la coreografía "Belmonte", de la compañía Gelabert-Azzopardi, de 1988, interpretada por sus creadores.

Entre el 16 y el 26 de septiembre inaugurarán temporada cuatro creadores emblemáticos, artistas residentes del teatro y patrones del Lliure: Cesc Gelabert, Lydia Azzopardi, Frederic Amat y Carles Santos.

En estos tiempos de toros sí, toros no, los responsables del Lliure han dejado claro que el espectáculo no pretende ser una biografía de Juan Belmonte sino, en opinión de Amat, de una obra simbólica, de abstracción, en la que Gelabert se viste de luces con un traje que es también un cementerio marino.

El director del Teatre Lliure, Alex Rigola, inaugurará la reapertura de la emblemática sala del Lliure en el barrio barcelonés de Gràcia el 30 de septiembre con "La Gata sobre el tejado de zinc", de Tennessee Williams, en una adaptación libre de la obra que llevó al cine Elia Kazan, interpretada por los actores habituales del Lliure y coproducida con el Centro Dramático Nacional.

"Vamos justos de tiempo, estrenamos el teatro la semana próxima pero las obras van por buen camino, el teatro mantiene su esencia con un equipo modernizado y todas las seguridades, entrada, bar y escenario fantásticos y una instalación espectacular de Amat para la escalera", ha señalado Rigola.

El director Carles Santos pondrá en escena en la sala Fabià Puigserver, del 7 al 17 de octubre, "Chicha Montenegro Gallery", en la que vuelve a trabajar con música y teatro, aunque en esta ocasión sin instrumentos y sólo con un cuarteto clásico de voz.

El artista Xavier Albertí ha adaptado y dirige para el Lliure, también en la sala de Montjuïc, "Vida privada", de Josep Maria de Sagarra, del 5 de noviembre al 5 de diciembre, y Albert Pla y Pascal Comelade ponen en escena en el mismo teatro "Somiatruites"

La compañía andaluza La Zaranda ofrecerá "Futuros difuntos", los días 14 y 15 de diciembre, en la que a partir de un manicomio se ofrece una metáfora de la situación española actual.

Al Lliure de Gràcia llegará del 15 al 19 de diciembre "Fin de partida", de Samuel Beckett, dirigida por Krystian Lupa, en un montaje del Teatro de la Abadía y a la sala Fabià Puigserver el 17 y 18 de diciembre llega una "Casa de Bernarda Alba", de Federico García Lorca, interpretada por seis mujeres gitanas no profesionales, algunas de las cuales tuvieron que aprenderse el papel de memoria al no saber leer.

Otros de los espectáculos que el Lliure ofrecerá en Montjuïc serán, "Otelo", de William Shakespeare, dirigido por Thomas Ostermeier, del 21 y 22 de diciembre; "L'arquitecte", de David Greig, dirigido por Julio Manrique del 12 de enero al 13 de febrero; y una creación del ciclo "Radicals Lliure", de Angélica Liddell, el 19 de febrero.

En el escenario de la antigua sede remodelada del teatro barcelonés en Gràcia, el próximo director del Lliure y sucesor de Rigola, Lluís Pasqual, pondrá en escena, del 13 de enero al 27 de febrero, "Celebració", de Harold Pinter.

El Lliure está dando los últimos toques al despacho de su próximo director, a partir de la próxima temporada, mientras Rigola ya va empezando a trabajar en su colaboración en la Bienal de Venecia.

En Gràcia se presentará también "Dues dones que ballen", de Josep Maria Benet i Jornet, del 10 de marzo al 24 de abril, y en Montjuïc el 22 de marzo la actriz Rosa Maria Sardà recreará a Josep Maria de Sagarra para conmemorar que en 2011 se cumple el medio siglo de su muerte.

Con su programa "Última cena" y el espectáculo "The end", que escribe para despedirse, Rigola da por terminados sus ocho años al frente del Lliure, contento de haberse visto rodeado de artistas que han desarrollado en este teatro su carrera y de haber colocado el nombre del teatro en la escena internacional.

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