El Museo de Gernika exhibe obras de Oteiza inspiradas en el bombardeo de 1937

  • Bilbao.- El Museo Euskal Herria de Gernika (Vizcaya) exhibe desde hoy hasta el 25 de julio próximo una muestra de 25 piezas realizadas por el escultor vasco Jorge Oteiza entre 1942 y 1987 inspiradas en el bombardeo de la villa, en 1937, y en el cuadro "Guernica" de Picasso.

El Museo de Gernika exhibe obras de Oteiza inspiradas en el bombardeo de 1937
El Museo de Gernika exhibe obras de Oteiza inspiradas en el bombardeo de 1937

Bilbao.- El Museo Euskal Herria de Gernika (Vizcaya) exhibe desde hoy hasta el 25 de julio próximo una muestra de 25 piezas realizadas por el escultor vasco Jorge Oteiza entre 1942 y 1987 inspiradas en el bombardeo de la villa, en 1937, y en el cuadro "Guernica" de Picasso.

La exposición, titulada "La Gernika de Jorge Oteiza", reúne medallas conmemorativas, relieves y dibujos hechos por el artista de Orio (Guipúzcoa) en bronce, escayola o papel en torno a la villa de Gernika, como referente simbólico de la cultura vasca, y al cuadro "Guernica", de Picasso, ha explicado la diputada foral de Cultura de Vizcaya, Josune Ariztondo, durante la presentación de la muestra a los medios de comunicación.

Ariztondo ha destacado que el escultor vasco "tuvo a la villa foral no sólo como referente histórico de Euskadi, sino también como referente simbólico de la cultura vasca en general, lo que le llevó a realizar un buen número de trabajos figurativos y abstractos sobre Gernika".

El comisario de la muestra, Xabier Sáenz de Gorbea, ha recordado que "Oteiza siempre quiso estar presente en Gernika" y ha dicho que "al artista no le hubiese gustado la muestra porque lo que él quería era quedarse en Gernika, no de forma parcial durante los tres meses que va a durar, sino de manera duradera y rodeado de otros autores vascos con los que fabuló ideas y conspiró ejercicios éticos de superación".

Sáenz de Gorbea ha destacado que "Jorge Oteiza estuvo en Gernika en numerosas ocasiones e, incluso, se dejó fotografiar de rodillas ante el Árbol de Gernika, y también hizo saber el compromiso de su posicionamiento político, pero no logró, en relación a Gernika al menos, que sus ideas tuvieran el eco necesario para culminar alguno de los ilusionantes proyectos que propuso".

"La sociedad vasca y, sobre todo, sus instituciones de entonces no estuvieron a la altura de la importancia de aquellos proyectos y no quisieron o no supieron cómo transformar sus acciones en algo real y tangible", ha lamentado.

"Esta exposición en Gernika -ha resumido su comisario- es un pulso con la historia, mediante 25 obras que reivindican la memoria de su esfuerzo e interés por la villa foral y ofrecen la idea de unas acciones que hablan de triunfos, pero también de fracasos, propios y de todos".

Esta muestra forma parte del programa iniciado en 2008 por el Museo Euskal Herria de Gernika para dar a conocer al público los trabajos realizados por los creadores vascos inspirados en el bombardeo que sufrió la villa foral en 1937 y que inició el escultor Remigio Mendiburu y prosiguió en 2009 el vizcaíno Nestor Basterretxea.

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