"El Páramo", de Jaime Osorio, terror psicológico en alta montaña

  • Eduardo Bielsa.

Eduardo Bielsa.

Madrid, 11 ene.- Rodada en una base militar real situada a 4.300 metros de altura, "El Páramo", la ópera prima del colombiano Jaime Osorio, se sumerge en el miedo para generar violencia entre los soldados de una operación diseñada para capturar guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"Me gustan las películas de género así que al principio la idea fue hacer un filme que hablara de los mitos locales latinoamericanos sobre fantasmas y monstruos. Pero muy pronto surgió una historia sobre el miedo. El miedo en Colombia a nuestra situación actual", ha explicado Osorio en una entrevista con Efe.

Así, Osorio construye en su primer largometraje, "El Páramo", que llega a los cines españoles hoy, una trama que "exige mucho del espectador" y que el director colombiano pretende que no sea una película más de terror.

"Lo que quería era no solo asustar al espectador", dice Osorio, para quien "el miedo tenía que surgir naturalmente a partir de los soldados" y que el público entendiera "los diferentes procesos por los que pasa cada uno de ellos dependiendo de su pasado".

En todo este viaje por el temor de los militares, llevados a escena por los actores Juan David Restrepo, Mauricio Navas y Alejandro Aguilar, entre otros, tendrá mucho que ver una mujer encadenada que aparece tras los restos de una masacre cuando el comando alcanza la base en plena montaña, inundada de una neblina que no es un simple fenómeno meteorológico.

"Las películas de terror tienen que encerrar a sus protagonistas. Pero lo que quería no es que su encierro fuera tanto físico como psicológico, para que eso los confrontara de nuevo con sus propios demonios", agrega el director.

Y es que, para Osorio, no servía encerrarlos tras unas rejas, y "la niebla funciona perfectamente, porque ellos solamente tienen que salir caminando".

"No es sólo una película de miedo, sino una película que habla sobre el miedo y como éste genera violencia", afirma.

Por ello, jugará un especial papel el personaje que interpreta la actriz Daniela Catz que, aunque breve en el guión, invita al espectador a pensar si ella, entre todos esos hombres, es la auténtica culpable de todo lo que sucede en la alta montaña o bien es una simple víctima.

"En todo caso lo que hace es catalizar el miedo de los soldados", aclara Osorio sobre una de las incógnitas principales de "El Páramo", presentada en 2011 dentro de la sección competitiva del Festival de Cine Fantástico de Sitges, donde el guionista colombiano recibió el Premio de la Crítica al Director Revelación.

De la recepción en su país natal, Osorio confiesa que pese a que no están acostumbrados a las películas de género, la gente ha agradecido muchísimo su historia y tratar un tema como la violencia y el miedo en Colombia.

Sin embargo, añade, esta "no es una película que invite a evadirse. Es una inmersión en la realidad". Por ello, Osorio quiere que la gente "salga pensando sobre el conflicto".

"Escarba dentro de lo más oscuro en general. Los soldados están sometidos a la violencia y al asesinato cada día. Primero pierden el rigor militar y eso los convierte en hombres, para después perder los rasgos de un ser humano y transformarse en animales", sostiene.

Sobre sus nuevos proyectos, Osorio adelanta que le gustaría seguir trabajando en el género "mientras no sea solamente por asustar" y concluye rotundo: "Lo que es bueno, es conocer qué nos permite el miedo socialmente y entender aspectos oscuros del ser humano.

Mostrar comentarios