El teatro, la "novia eterna" de Iñaki Miramón

  • Madrid.- El actor Iñaki Miramón vuelve a escena con la obra "¡Manos quietas!", texto que se estrena el 8 de septiembre y que para él es como "un nuevo amor" que llega con la misma cantidad de inseguridad y nerviosismo, pero que le permite confirmar que su "novia eterna" es el teatro.

El teatro, la "novia eterna" de Iñaki Miramón
El teatro, la "novia eterna" de Iñaki Miramón

Madrid.- El actor Iñaki Miramón vuelve a escena con la obra "¡Manos quietas!", texto que se estrena el 8 de septiembre y que para él es como "un nuevo amor" que llega con la misma cantidad de inseguridad y nerviosismo, pero que le permite confirmar que su "novia eterna" es el teatro.

"La televisión es la que más me ha dado popularidad, ella y el cine son unas novias muy especiales, pero mi gran novia es el teatro; digamos que me gusta más para convivir el teatro y para tener aventuras me gustan más el cine y la televisión", comenta el actor bilbaíno en una entrevista con Efe.

Dirigido por Esteve Ferrer, "¡Manos quietas!" -original de Piti Español- se presentará en el Teatro Marquina de Madrid y en ella Iñaki da vida al personaje de Manuel y comparte escenario con Chiqui Fernández, Mariola Fuentes, Marta Calvó y José Luis Martínez.

En la obra se narra la interacción que tienen cuatro padres de familia que acuden a la escuela para hablar sobre sus hijos; sin embargo, esto pasará a segundo plano, pues la conversación tomará un tono que "a veces roza el ridículo", al desarrollarse en un ambiente "políticamente correcto".

"Manuel es un hombre que le han echado del trabajo, está un poco solo y una gran equivocación provoca una situación que se le escapa de las manos, a él y a todos los personajes; así, ese error se convierte en una bola de nieve y se hace más grande, todo se confunde y la realidad se desvirtúa y se hace más falsa", explica Miramón.

Por ello, considera que el personaje que le ha tocado interpretar es muy próximo al público, pues dada la situación que se vive a nivel mundial en torno a la crisis, hay muchas cosas que el espectador podrá entender.

"Una cosa que ha hecho Esteve Ferrer -el director- es intentar que todos los personajes tengamos nuestra verdad y la defendamos. Sé que el público me va a entender bastante", revela el actor, quien considera que "¡Manos quietas!" es una función "de conjunto".

"Y es que todos tenemos que encajar bien para que funcione y no puede estar bien sólo uno: o estamos todos bien o la función se cae, eso es una cuestión que todos los compañeros tenemos clara".

Entre sus proyectos se encuentra una historieta que podría salir a finales del año y el llevar a cabo la puesta en escena de una pieza teatral que él mismo escribió; sin embargo, también piensa retomar un par de facetas suyas poco conocidas: la fotografía y la escultura.

"Ahora estoy muy metido en la fotografía y quizá exponga escultura y fotografía a principios de año. El tipo de escultura que hago es figurativa, bastante estilizada y muchas veces basada en ramas humanizadas que he encontrado por el campo", concluye el actor.

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