El Thyssen de Málaga dedicará una muestra a la naturaleza como paraíso

Málaga, 23 mar.- La representación de la naturaleza como paraíso es el hilo conductor de "Paraísos y paisajes", un recorrido por la pintura de paisaje desde el siglo XVII hasta mediados del XX, con obras de Jan Brueghel, Gauguin o Bierstadt y que abrirá sus puertas en el Museo Carmen Thyssen de Málaga el 31 de marzo.

"En el Génesis, Yahvé crea un jardín singular, frondoso y con gran vegetación y sitúa a los animales de la Creación y a la primera pareja humana, que viven allí en armonía con la naturaleza", ha señalado la directora artística del museo y comisaria de la exposición, Lourdes Moreno, a Efe.

En la colección de Carmen Thyssen abundan las referencias "a ese paraíso bucólico, idílico y pintoresco, siempre con un sentido de convivencia armoniosa, con paisajes serenos y de belleza en armonía", según Moreno.

Uno de los pilares de la exposición es "El jardín del edén", de Jan Brueghel el Viejo, pintada entre 1610 y 1620, y que sigue la tradición bíblica, con los animales de la Creación en primer plano y, al fondo, Adán y Eva.

En la escuela holandesa "el peso de la religión no es tan potente, y los paisajes son naturalezas idealizadas, no en el sentido bíblico ni mediterráneo del paraíso, sino con el componente calvinista y protestante del paraíso a través del trabajo y del esfuerzo", ha apuntado Moreno.

La muestra, que traza un recorrido por la pintura de paisaje desde del XVII hasta mediados del XX, analiza "la representación de la naturaleza como paraíso -muchas veces idealizado, otras de carácter pintoresco o incluso naturalista- siempre desde un punto de vista poético", según la web del Museo Carmen Thyssen de Málaga

Para ello reúne casi medio centenar de obras, de las que alrededor de una decena proceden de la colección permanente del Museo Carmen Thyssen y las restantes, del Museo Thyssen de Madrid.

Moreno ha señalado que en la exposición, están presentes, entre otros, el paisaje rococó, representado por François Boucher, cuyos paisajes son "idílicos y bucólicos, con presencia de ruinas romanas y vestigios de la Antigüedad".

Además, tienen un peso importante, tanto cuantitativo como cualitativo, los paisajistas norteamericanos, "que encontraron una tierra virgen e hicieron de la representación del territorio un signo de identidad", con nombres como Frederic Edwin Church o Albert Bierstadt.

Los maestros impresionistas como Pissarro, Renoir o Gauguin ofrecen visiones "muy diferentes". Así, el primero expone "un mundo humilde con los campesinos trabajando, pero el tema no es este trabajo, sino un telón de fondo con una pantalla vegetal impresionante y las distintas tonalidades de verde son las protagonistas".

Mientras, de Renoir se muestra "un humilde campo de trigo con un potente color dorado, de gran riqueza cromática", y Gauguin plasma a sus hijos "en un momento lúdico en el jardín, de forma que el propio cuerpo de los niños casi se difumina con la hierba crecida", ha señalado a Efe la directora del Museo Carmen Thyssen.