Epidemia de banderas rusas en Simferópol

    • En la plaza Lenin, un megáfono resuena con mensajes contra el movimiento del Maidan, que los nuevos 'tutores' de Crimea califican como nazi.
    • 'Ellos han hecho esta crisis desde la amenaza y la intimidación', señalan los prorrusos.

En el centro de Simferópol los colores que rompen el gris monótono de la ciudad este viernes son los de las banderas rusas que han comenzado a ser unaplaga a dos días del referéndum.

Vasilyev Maxim ha llegado a Crimea desde Kursk, ciudad en la que es diputadolocal, para apoyar la anexión a Rusia de este territorio. Frente a la Rada seobserva un bosque de banderas nostálgicas, con la enseña de la era soviética yel 79, recuerdo del aniversario que se cumple de la batalla de Kursk. La mayorconfrontación de carros blindados de la historia, que marcó el curso de la GranGuerra Patriótica.

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La batalla de Kursk, que marcó el comienzo del decisivo contraataque soviético contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial, se ganó con una pequeña superioridad de fuerzas, según los expertos rusos en un evento dedicado al 70º aniversario de la contienda. La batalla de Kursk, u operación Ciudadela para los nazis, duró 50 días y noches, del 5 de julio al 23 de agosto de 1943. Fue el mayor enfrentamiento entre carros de combate en la historia de la humanidad: en él participaron 6.000 tanques en total acompañados por 4.000 aviones.

El combate, muy conocido en Rusia, muchas veces se olvida injustamente fuera de sus fronteras, donde se suele recordar principalmente las contiendas por Moscú o Stalingrado. Sin embargo, la batalla de Kursk no fue menos importante en el desarrollo de la Guerra. Por primera vez, los nazis tropezaron con una resistencia implacable de los soviéticos. De hecho, troncó definitivamente la ofensiva nazi en el Frente Oriental.

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A escasos metros, en la plaza Lenin, un megáfono atrona las calles conmensajes consta el movimiento del Maidan, al que los nuevos tutores de Crimeaconsideran un movimiento nazi. En la superficie que preside un estatua deLenin, los cosacos pasan revista con el aire marcial que les permiten sus años,muchos en la mayor parte de los casos. El mensaje de hoy es conciliador: sean ustedes amables para que los crimeos puedan votar. Muy cerca les escuchan los elementos radicales prorrusos, que sonríen en sus bocas desdentadas. Ellos han hecho esta crisis desde la amenaza y la intimidación. Aún viven su momento de gloria. Veremos que ocurre con ellos el lunes, porque el Kremlin, como Roma, no paga traidores.

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